Alec Wintering durante el partido ante Obradoiro. / fotografiardiaz

Los morados logran una victoria trabajada y de muchos quilates ante el Monbús Obradoiro en un partido  muy igualado (91-83)

El Palencia rindió hoy ante un grande, el Obradoiro y suma su séptima victoria de la temporada,  gracias a un Alec Wintering inconmensurable que mandó, dirigió y anotó a gusto. Si hubiera estado haciendo el Camino de Santiago, habría llevado a todo el equipo sobre sus espaldas ante el Pórtico de la Gloria.

Estadísticas del partido

No era un rival fácil ni mucho menos al que se tenía que enfrentar el Palencia. El único con el que repetirá de la temporada pasada, porque ambos se montaron el vagón de descenso de la ACB. Obradoiro empujado por las circunstancias, pero puesto en la vía, desde el principio, para volver a la máxima categoría, donde ya era un clásico. Tanto, que trajo a sus dos internacionales recién fichados, que dieron mucha guerra.

Empezó Quintela atacando a Palencia, porque suyas fueron las primeras canastas de los visitantes. Tres canastas gallegas, tres de base.  En cambio en Palencia, las jugadas eran más corales, como la anotación: Borg, Vaulet y Krutwig.

Defendiendo impuso su juego el Súper Agropal, atajando las embestidas visitantes, salvo las protagonizadas por Quintela. 10 a 10 consumido la primera mitad del cuarto inicial. Tiempo para Wintering y Kunkel (por Oroz y Borg), y para un parón en el partido, debido al fallo de uno de los marcadores de posesión. Elemento que volvió a fallar minutos después. Para entonces, el Obradoiro se había puesto por delante. Estaba errando las jugadas de ataque el Palencia, incluso había perdido algo de intensidad atrás. Obradoiro, por su parte, dio entrada a Rati, recién aterrizado y que dejó de inicio muestra de su calidad aunque sin el premio de la canasta.

El partido se estaba disputando por dentro, en la pintura, sin apenas tiros de tres por parte de los palentinos, con Krutwig imponiéndose a sus pares. Misma labor que tuvo que hacer Chema, que reapareció, ya sin máscara.

Al final del primer cuarto, 17-14.

Segundo cuarto.

Mballa fue el autor de la primera canasta palentina al rebañar un error de Dimitrov. Presionaba el Palencia, cargaba de personales a su rival, le ponía más intensidad y tras 11 minutos de juego, los primeros dos triples locales con Kunkel y Dimitrov.

31-23, transcurridos tres minutos del segundo cuarto, con un Súper Agropal Palencia que estaba imponiendo su juego y su acierto también ahora desde el triple y doblegando en la pintura.

Tal fue el despegue de los morados que se pusieron 11 arriba a falta de menos de 5 minutos para el descanso. 38 -27. Tiempo muerto santiagués que dieron entrada a Balvin para emparejarlo con Krutwig.

@fotografia.rdiaz

Tuvo repercusión el paso por el banquillo, y la entrada del checo, porque los gallegos enjugaron parte de la ventaja local, tanto como para dejarla en solo tres puntos tras unos minutos con el equipo sin rumbo, y anclado en los 39 puntos.

La intensidad defensiva de los gallegos con el pívot en la cancha era asfixiante y si alguna bola quedaba lamiendo el aro, ya se encargaba Balvin de despejarla. El último arreón de los palentinos les hubiera valido para irse al descanso con una ventaja de cinco puntos, pero un error en la marca de Vaulet a Stephens en la última jugada volvió a ajustar el marcador al máximo. Al paso por los vestuarios, 41-39.

Tercer cuarto.

Nada más empezar el cuarto, los coruñeses se pusieron por delante, merced a dos ataques fallados y a que Balvin volvió a imponer su poderío físico. Una cabeza y muchos kilos le sacaba el checo al jugador más grande de los palentinos.

Ni con faltas lograban parar los palentinos al pívot. Cuatro faltas en dos minutos. El partido ajustado. Pero la intensidad defensiva al esto de jugadores gallegos, los robos y los contraataques permitieron a los de Guil volver a estirar la goma a su favor. 51-46.

Tiempo muerto de Gonzalo Rodríguez y descanso para Balvin entonces máximo anotador de los suyos.

No dio descanso Guil a Krutwig que ahora sí podía sacar ventajas el ataque, pero sí tuvo que sentar a Borg, por cuatro faltas. Reservarle para el final. Quien no descansaba era Wintering, que era quien mantenía a flote los ataque locales cuando se cerraba la puerta santiaguesa.

Un partido de ida y vuelta, pero con los gallegos ahora manejando la pintura con pases filtrados y picados para su pívot, Stevic, que sumaba ya, a falta de tres minutos, 12 puntos.

Entró en una fase de errores los palentinos, desaprovechando ataques, cometiendo faltas, dejándose la ventaja hasta el punto de que los gallegos se pusieron por delante a falta de un minuto para el final del cuarto, aunque los palentinos lo remediaron: 65-63.

Último cuarto.

Como tras el descanso, los visitantes igualaron la contienda. Guil volvió a contar  con Krutwig en la pintura. Pero el problema ahora eran los tiros, que no entraban y los gallegos aprovecharon para con Varela ponerse por delante.

Entrada para Wintering, triple de Krutwig, y cuarta personal de Kunkel, todo sin solución de continuidad. A diferencia de Oroz, Wintering sí toma la responsabilidad con gusto (de tiro y de dirección), y puso en ventaja a los locales. Y colocó ya el bonus a favor de los morados a falta de 7 minutos.

Cuatro arriba para los palentinos que sacaron a su equipo de gala para tratar de rematar el partido: Wintering, Borg, Kamba, Vaulet y Krutwig.

Una renta que se fue manteniendo mientras Krutwig pedía ruido al pabellón y el crono iba pasando.

Tomó protagonismo en el lado visitante la dupla Quintala-Balvin, como en Palencia Wintering que hacía de timonel de los designios del Palencia.

2 minutos y ventaja de seis para los locales. El pabellón vibrando.

Ventaja que se amplió a 8 puntos a falta de menos de un minuto gracias, al MVP del partido, Alec Winterig, que jugó más de 25 minutos.

Al final, 91-83 y una victoria importantísima antes de encarar el duelo ante el actual líder, el Fuenlabrada.

El máximo anotador de los locales, Wintering, con 23 puntos y una valoración de también 23 items. El segundo, en valoración, Vaulet, con 20.

Guil: “Ha sido un partido de control, de cara a cara con un equipo top de la Liga”

Rodríguez (Obradoiro): “Aspiramos a defender mejor”

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