La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, señala que son “unos pocos” los que utilizan mal esta medida para ayudar a las familias vulnerables
ICAL
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, advirtió hoy que Renfe estudia y analiza establecer medidas “más duras” para aquellos usuarios del abono de transporte gratuito que hagan un mal uso del mismo. En principio las medidas eran disuasorias, pero ahora se analiza endurecerlas”, precisó.
A pesar de ello, reconoció hoy que se han producido algunas “pocas” anomalías en el uso del abono gratuito de transporte, y defendió que Renfe y la Delegación han puesto las medidas suficientes para intentar corregirlas y que no se reserven plazas, que después no son ocupadas.
“La mayoría de la gente hace un uso responsable de esta medida adoptada por el Gobierno para ayudar a las familias que más sufren por las consecuencias que acarrea la guerra en Ucrania”, indicó.
Asimismo, aseguró que estos viajeros que reservan y no ocupan plaza causan perjuicios a otros, y por ello, Renfe analiza que no se haga un mal uso del abono. “Llamo al civismo y pido que no se haga un mal uso del abono para no perjudicar a los que lo necesitan”, alentó.
