Patrimonio – Turismo
Cristina Párbole, historiadora en la Fundación Santa María la Real en Aguilar de Campoo, y amante confesa del románico de su provincia, Palencia, ha iniciado una recogida de firmas para reclamar una regulación para que todos los monumentos del románico palentino cuenten con horarios de visita regulados y con profesionales encargados de contar su historia y su cuidado.
Para lograrlo, la precursora de campañas como ‘Por un románico abierto’ ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que apoye esta iniciativa, dirigida a las Cortes de Castilla y León, que busca reunir 500 firmas a través de la plataforma ‘Osoigo’, que fomenta la comunicación directa entre ciudadanos y políticos.
“La idea es que la gente sea consciente de la situación en la que se encuentran estos monumentos”, ha indicado a Europa Press la responsable de la iniciativa, quien anima a participar y compartir aunque “no hay tiempo límite para la recogida de apoyos”.
Según explica Párbole en el texto que acompaña a la recogida de firmas, estos monumentos suelen quedar “a cargo de los custodios, personas que, de forma desinteresada, se encargan de cuidar y de abrir, gratis, los monumentos palentinos; gente, en su mayoría muy mayor, y que carece de reemplazo generacional”.
Es el caso de Carlina García, en cuya casa descansa la llave de la Iglesia de Santa Marina (s. XII) en la localidad palentina de Villanueva de la Torre desde que ella tenía 14 años. Ahora, con más de 90, la tarea se le antoja titánica, por lo que los turistas que acudan a visitar el pueblo se la encontrarán cerrada.
“Cientos son los casos en los que un grupo de turistas ha llegado con la intención de visitar una ermita, un monasterio o una iglesia con la ilusión de disfrutar de nuestro románico y se han dado con la puerta, literalmente, en las narices”, agrega el texto de Párbole, quien añade que, aunque “en 2004, la Junta de Castilla y León y el Obispado de Palencia pusieron en marcha un programa de puertas abiertas en 485 monumentos entre julio y septiembre, desgraciadamente, en 2019 ya se hizo una reducción del tiempo de apertura”.
En respuesta, a finales de septiembre de 2019, se inició la iniciativa ‘Por un románico abierto’, que inundó las redes sociales de fotos de estos monumentos así como de mensajes reivindicativos que exigían a la Junta la apertura regulada de los monumentos, además de la contratación de profesionales conocedores de la importancia del patrimonio palentino.
La campaña consiguió que las quejas llegasen a las Cortes de Castilla y León, pero “el Covid-19 lo dejó todo en suspenso”, lamenta Párbole, quien con las esperanzas puestas en el “regreso escalonado a la vida prepandemia” critica que aún no ha obtenido respuesta.
Por todo ello, la historiadora se pregunta: “¿Es esta la forma de impulsar el turismo en Palencia o de dar a conocer su riqueza patrimonial? ¿De generar empleos y atractivo para frenar la despoblación?”. Y es que, a su juicio, “la apertura regulada del románico palentino daría a conocer mucho más y mejor el patrimonio de la provincia y ayudaría a frenar la despoblación al generar empleos”, lo que le lleva a solicitar a las Cortes de Castilla y León una normativa al respecto.
