S. Calleja / ICAL
La Gerencia Regional de Salud extenderá a la vuelta del verano el modelo de autoconcertación, conocido como peonadas, y los conciertos externos para reducir las listas de espera en las pruebas diagnósticas porque las demoras “son inasumibles”.
De este modo, copiará el modelo que ya se aplica en el plan de choque para rebajar la lista de espera en intervenciones quirúrgicas, porque “no hay fórmulas mágicas”.
De momento, la fórmula sólo se aplicará en el caso de las pruebas diagnósticas, ya que en el caso de las consultas Sacyl está en la fase de mejorar los procesos internos para aprovechar el rendimiento de los centros, ya que existen “ciertas holguras”.
Vázquez reconoce que se enfrenta a las “peores” listas de espera que podría tener la Comunidad. “Todo es susceptible de empeorar, pero ya es difícil que pudieran empeorar mucho más. Me he encontrado con unas listas de espera muy malas, tanto a nivel quirúrgico, como consultas externas y pruebas diagnósticas. Y se ha implementado un plan de choque que ha empezado a tener ciertos resultados”, con tres medidas que se trasladarán a las pruebas diagnósticas: mejorar la eficiencia en la jornada ordinaria, indispensable para utilizar las otras dos, la concertación interna y la externa. “ No se puede en este momento andar con exquisiteces, porque los pacientes tienen una demora inasumible”.
Regresar a datos de 2019
El plan de choque para reducir la lista de espera en intervenciones quirúrgicas, dotado con cinco millones de euros para este año, estará operativo hasta que los datos sean asumibles. “Siempre va a haber lista de espera, pero no es lo mismo 160 que unos 60 días” que era la situación de 2019, cuando Castilla y León estaba “bastante bien posicionada” en el conjunto de las comunidades autónomas.