La subvención de la Junta pretende lograr “inmuebles sostenibles con un mejor rendimiento energético y de bajas emisiones de carbono, además de abordar aspectos fundamentales que influyan sobre el bienestar y la salud”
El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León dio luz verde a una subvención de más de once millones de euros a la Universidad de Valladolid para financiar la rehabilitación de la Escuela de Ingenierías Agrarias y el Aulario en el Campus de la Yutera de Palencia, en el marco del Plan de Transición Justa 2021-2027. A través de las obras se pretende lograr inmuebles sostenibles con un mejor rendimiento energético y de bajas emisiones de carbono, además de abordar aspectos fundamentales que influyan sobre el bienestar y la salud.
El edificio de la Escuela de Ingenierías Agrarias de la Universidad de Valladolid en su Campus de la Yutera, en Palencia, acoge los grados de Enología, Ingeniería Agrícola y del Medio Rural, Ingeniería Forestal y Medio Ambiente e Ingenierías de las Industrias Agrarias y Alimentarias. Unos estudios que son “apuesta estratégica” de la Junta de Castilla y León para dar respuesta a sus necesidades sociales y de empleabilidad, en un sector como el agrario y agroalimentario.
Por su parte, el edificio del Aulario alberga numerosas aulas, laboratorios, talleres y espacios docentes, así como gimnasio, biblioteca y los decanatos de las facultades de Educación y Trabajo Social, distribuidos en dos plantas. Por ello, la Consejería de Educación destina 11.085.000 euros para financiar la rehabilitación de dicha Escuela y el Aulario, en el marco del Plan de Transición Justa 2021-2027.
Instalaciones eficientes y modernas
En concreto, ambas actuaciones de mejora repercutirán de forma efectiva sobre los alumnos del Campus de la Yutera al dotar de instalaciones más eficientes y modernas, además de cumplir con la iniciativa de la Comisión Europa de la Nueva Bauhaus Europa, iniciativa que busca unir sostenibilidad y diseño para crear una nueva forma de habitar ciudades.
Tras las obras, los edificios serán “más sostenibles y con un mejor rendimiento energético y de bajas emisiones de carbono”. Además de abordar aspectos que influyan en el “bienestar y la salud, como la mejora de las condiciones interiores mediante una calidad del ambiente interior (ventilación y calidad de aire, confort térmico, acústico y visual)”.
