El espectáculo musical que ofreció Charlotte Blues Band junto con las bailarinas del Gimnasio Cronos fue uno de esos momentos mágicos de los Sanantolines que a menudo pasan desapercibidos a la sombra de los grandes eventos
Toros, conciertos de artistas internacionales, ferias y fuegos de artificio… El programa de San Antolín tiene cientos de propuestas para todos los públicos y en distintos rincones de la ciudad. Y eso es maravilloso. Pero esa gran oferta hace que, a veces, pasen desapercibidas algunas pequeñas joyas, a la sombra las propuestas más multitudinarias. Y ayer, uno de los días más grandes en cuanto a calidad y cantidad de programación y con el concierto de Abraham Mateo como reclamo más importante, bajo los árboles de la Huerta de Guadián se produjo la magia: la formación palentina Charlotte Blues Band protagonizó la primera edición del Onda Roll, festival organizado por Onda Cero con vocación de continuidad, a la vista del éxito.
Todo un show musical donde el sexteto demostró una vez más la calidad de su propuesta, pero también la exuberante energía escénica que desbordan sus dos divas del rock and roll, Keri Wilson y Yoli Valdespina, la primera con una potente voz y la segunda, con el saxo. Dos Un talento que comparten también Fran Martínez a la guitarra, junto con Óscar Erice al teclado, José Antonio Martínez a la batería y el bajista Pablo Hoyos. Llevan siempre por bandera, además, la memoria de Jorge Moro, fundador de la banda que falleció hace dos años.
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Los ‘Charlotte’ ofrecieron un viaje por el mejor rock and roll de los años 50 y 60, pero lleno de sorpresas: las bailarinas de Gimnasio Cronos le dieron color a un concierto que fue de menos a más, hasta terminar en lo más alto y con el público bailando en un entorno tan encantador como es este rincón de la Huerta de Guadián, al abrigo de la iglesia románica de San Juan Bautista. Tras ellos, puso el broche final la sesión DJ del dúo femenino Meteoritos y Vendavales.
Tuve la suerte de estar allí. ¡Qué espectáculo tan bonito! Me gustó mucho.