El Restaurante La Traserilla ‘‘se muda’’ a la Calle Don Sancho para ampliar la barra y el espacio dedicado al picoteo sin perder ni una pizca de su identidad. Un cambio que la familia Sánchez concibe como un entrañable homenaje a la memoria de Erika, siempre presente en la hostelería y gastronomía palentina
«Si vas a soñar, exagera, la vida es demasiado corta para no intentar lo que realmente queremos». El lema de Erika Sánchez, célebre y querida cocinera palentina fallecida en 2022, luce en la pared del nuevo local del Restaurante La Traserilla. Una motivación que dibujaba la sonrisa perenne de la chef palentina y que ahora exhorta a su hermano, Luis Metodio, a elevar su proyecto un paso más. O, usando también una de las palabras favoritas de Erika, a hacerlo evolucionar.
El Restaurante La Traserilla ha evolucionado este mes con un cambio de sede. Su histórica casa de comidas en la calle San Marcos, que abrió sus puertas en el año 1995, ha sido trasladada al local que ocupaba el gastrobar Casa Lucio, en la Calle Don Sancho número 1, cuyas raíces entroncan con la propia historia de la hostelería palentina: allí se ubicaba uno de los establecimientos más singulares de la ciudad, el Hotel Samaria, que fue un icono a nivel nacional en las primeras décadas del siglo XX.
De hecho, su salón principal aún conserva elementos arquitectónicos de aquella etapa, ahora enriquecidos con fotografías de la historia de la familia Sánchez y su célebre cocinera. El nuevo local permite a La Traserilla ampliar su servicio de gastrobar y picoteo. «Aunque perdemos espacio de comedor, ahora hemos triplicado nuestra barra», explica su gerente, Luis Metodio Sánchez.
Ahora, además, el gran espacio, con capacidad para más de medio centenar de personas sentadas y otras tantas de pie, permite una mayor rotación para quienes quieren disfrutar de la rica calidad y variedad de raciones y tapas de La Traserilla, o saborear uno de los vinos selectos que sirve este sumiller, que ha participado en el Campeonato de España de sumilleres.
«Con este cambio, buscábamos ofrecer más facilidades al cliente, pero también poder atenderlo mejor», detalla Sánchez. Las escaleras de la antigua Casa de Comidas eran uno de sus rasgos más singulares, pero, aún así, representaban una barrera arquitectónica para algunas personas. «Ahora queremos que el cliente esté más cómodo para disfrutar de nuestra cocina de siempre».
Cocina evolutiva
Una cocina que conserva los platos diseñados por Erika Sánchez, pero sobre todo su identidad: una audaz evolución de la gastronomía palentina basada siempre en los productos de la tierra de la mejor calidad. Propuestas que no dejan indiferente a nadie, sin dejar de sorprender, pero conservando la raíz. Desde la menestra hasta el lechazo, pasando por las carnes de la Montaña Palentina o la rica huerta de la provincia.
Ahora, en el servicio de barra, pondrán en valor su carta de picoteo y su oferta más exótica (como sus afamados poke bowls). Pero también, por supuesto, esa parte de la gastronomía que se bebe en copa. «Nuestra idea es ofrecer vinos especiales en barra, para que esa calidad pueda disfrutarse también en un contexto más informal, tomando algo entre amigos», explica el sumiller.
Otro concepto para una Traserilla que aprovecha esta evolución para hacer crecer su equipo, incorporando más profesionales en cocina y en sala, entre ellos, los hijos de Erika, María y Jorge, que continúan su legado con la misma ilusión.
Un sueño a lo grande, exagerado, que nos recuerda la lección de Erika: sólo así se alcanza lo que uno desea de verdad.
Conocía a Erika después en mi trabajo en el centro de salud hablabamos de nuestro proceso pues yo también pase por ello se fue yo aún sigo aquí tu sonrisa y tu fuerza me acompañan
Tendrán suerte, se la deseamos y se la merecen. Erika me dió un curso de cocina, gran profesional y cercana, al final fuimos amigas. Su partida nos dejó descolocados y profundamente tristes. Sigue en nuestros corazones, siempre ♾️💗.