Jugadora del Colina Clinic Femenino – PALENCIA RUGBY CLUB
El Colina Clinic Palencia Rugby Club Femenino acaba de terminar la temporada. ¿Cuál es el balance que como jugadora haces de este año?
Empezamos el año con pocas jugadoras y se fueron incorporando bastantes compañeras nuevas, así que el objetivo de esta temporada era aprender entre todas y pasárnoslo bien y creo que lo hemos superado, porque además hemos obtenido muy buenos resultados y ha habido mucha progresión. Estoy muy contenta sobre todo con las jugadoras que empezaban este año, creo que han hecho un gran trabajo y gracias a ellas hemos conseguido sacar el equipo adelante.
Este año por fin se pudo formar equipo femenino, en el que también han formado parte jugadoras de Salamanca. ¿Crees que el rugby femenino está cobrando cada vez más importancia en Palencia?
Se hizo mucho esfuerzo por captar chicas nuevas y la pandemia lo complicó bastante al ser un deporte de contacto. Aunque finalmente se pudo formar el equipo, tenemos que seguir esforzándonos y creo que estamos en el camino correcto. Desde el club estamos organizando actividades y eventos de promoción para que el rugby femenino crezca en Palencia y resuene tanto como lo hace el senior masculino. Os invitamos a seguirnos en redes sociales para enteraros de lo que tenemos entre manos.
¿Qué crees que has aportado tú al resto del equipo?
Esta sería mi tercera temporada en el PRC, pero he jugado varios años en Salamanca, Bélgica y Australia antes de venir aquí. Creo que en Palencia no es tan fácil encontrar a chicas que ya hayan jugado, así que supongo que mi mayor aportación fue llegar sabiendo jugar algo al rugby. Aunque las chicas nuevas aprenden rápido, siempre es un plus que vengan jugadoras con un poco de experiencia.
Cuéntanos… ¿cómo te iniciaste en el deporte del balón ovalado?
Antes de irme a estudiar a Salamanca hacía ballet. Una vez allí, tuve que dejarlo y eso me dio muchos problemas porque el deporte, en general, ayuda a llevar una rutina, y por supuesto a estar mejor física y mentalmente. A mí, personalmente, me afectó muchísimo, tenía insomnio y no rendía igual. Un amigo me sugirió que probara el rugby, y las chicas del ADUS, el equipo universitario, me acogieron desde el primer día. Además de que mi salud mejoró, me gustó tanto el deporte y el ambiente, que sin darme cuenta llevo jugando siete años.
En el deporte se habla mucho de valores. ¿Pero el rugby aporta valores añadidos?
Solo hay que ver un partido de rugby para darse cuenta de que tiene valores que no se ven en otros deportes, como el respeto al árbitro o a los rivales. Contaría más, pero creo que los domingos en la Balastera se entenderá mejor.
¿Qué les dirías a esas chicas que tienen el gusanillo del rugby para que den el paso y se animen a probarlo?
Puede que dé un poco de vergüenza bajar a entrenar el primer día sin conocer a nadie, pero todas hemos pasado ese momento y ahora estamos encantadas de formar parte de esta familia. De verdad que no mordemos, solo placamos, pero si os animáis, el primer día os perdonamos.
¿Estás pensando ya en la próxima temporada?
Por supuesto. Ahora que hemos terminado esta temporada nuestra idea es hacer mucha promoción en Palencia para captar chicas que vayan aprendiendo y entrenando, y así tener un equipo preparado de cara a la próxima.
Creo que es un buen momento para iniciarse en el rugby, porque no tenemos la presión de los partidos de liga y además empieza el buen tiempo.
FOTOGRAFÍA: DIEGO VEGAS