Vehículo de la Policía Local de Palencia. / Óscar Herrero
Vehículo de la Policía Local de Palencia. / Óscar Herrero

La alcaldesa considera que no existe “un problema de seguridad en la ciudad bajo ningún concepto”, pero advierte de que al Ayuntamiento “no le temblará la mano” a la hora de imponer sanciones a “la hostelería que causa este tipo de problemas”

La alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés, ha valorado los graves incidentes ocurridos durante este fin de semana, una pelea multitudinaria entre bandas rivales que causó, entre otras consecuencias, dos agentes de la Policía heridos y cuatro detenidos.

La pelea multitudinaria en la Calle Rizarzuela dejó dos agentes heridos

Cuatro detenidos tras una pelea multitudinaria en la calle Rizarzuela

En primer lugar, Miriam Andrés trata de calmar los ánimos recalcando que “no es un problema de seguridad en la ciudad, bajo ningún concepto”, sino que se trata de “incidentes aislados entre pandillas rivales” como los que se están produciendo “en cualquier otra ciudad de nuestro entorno”.

Andrés considera que, en el momento en que se produce una pelea como la vivida el pasado fin de semana, “lo único que se puede hacer es lo que se hizo: enviar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”. Pero considera importante la adopción de medidas preventivas a través de los mecanismos municipales en lo que concierne a “horarios, ruidos y demás normativas”. Advierte de que serán rigurosos “con la hostelería que provoca este tipo de problemas”.

No obstante, la alcaldesa advierte de que “al Ayuntamiento no le temblará la mano” a la hora de imponer “las mayores sanciones” para intentar frenar esa escalada de incidentes violentos.

La Zona Vieja, “saturada y problemática”

Una de las medidas por las que apuesta el equipo de Gobierno, según ha declarado la primera edil, es la revisión de licencias de establecimientos de ocio nocturno en la Zona Vieja. De hecho, se han dado de baja tres licencias de bares y discotecas en este entorno “porque llevaban cerrados sin actividad más de cuatro años. Por lo tanto, el Ayuntamiento ha provocado la caducidad de esas licencias para que ya no se puedan volver a abrir porque consideramos que es una zona ya saturada y problemática de cara al ocio nocturno”.

Asimismo, la alcaldesa ha destacado que se está interviniendo en aquellos locales que están abiertos y que no cumplen la normativa, generando “algunos problemas y algunas infracciones continuadas”, por lo que se les ha aplicado medidas como el precinto de los equipos de sonido o la aplicación de sanciones, “las mayores posibles dentro de la horquilla” de multas permitidas por la normativa. “No nos va a temblar el pulso si es necesario clausurar si se trata de un posterior foco de problema”.

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