La exposición permanente ‘Los playmobil que cuentan historias’ se muda de Villamuriel a Astudillo para ampliar sus dioramas y expandir su universo creativo y singular
Cualquier niño o niña que juegue con playmóbiles (da igual si tiene 9 o 43 años) sabe que este universo imaginativo presenta un riesgo importante… Siempre va a más. Un click lleva a otro; un set tiene su continuación en el siguiente. Y un castillo o palacio puede crecer en tantas estancias como las que quepan en nuestra imaginación. Bueno. En nuestra imaginación… Y en nuestra casa. Que suele ser mucho más limitada.
Así surgió la colección permanente de Abraham Nieto y Rubén de la Fuente, dos amigos de Villamuriel de Cerrato que, animados por sus parejas, decidieron compartir con el mundo su pasión por los juguetes de la casa alemana Playmobil, creando dioramas temáticos e instalaciones en un pequeño museo cedido por el Convento de Nuestra Señora de la Consolación, en Calabazanos (Villamuriel de Cerrato).
‘La Biblia en un click’ fue la primera instalación que diseñaron y, después, el proyecto fue creciendo hasta convertirse en la única exposición de carácter permanente de este tipo en Castilla y León, dado que no es una mera colección de Playmobil, sino un museo que cuenta un relato, estructurado en áreas temáticas como el cine, la historia de Palencia, las aventuras (bomberos, egipcios, Asterix y Obélix o piratas, por ejemplo), sin olvidar el propio Evangelio con el que empezó esta aventura.
El pasado 15 de julio, Abraham y Rubén trasladaron su exposición al colegio de los Salesianos en Astudillo, donde disponen de más espacio y mejores recursos para ir más allá en sus creaciones. Por ejemplo, con un videomapping sobre un castillo, creado por el artista Juan Ignacio Arteagabeitia (Atila).
O con espacios mejor acondicionados para conservar la exposición y ampliarla. De hecho, la colección ya ronda las 70.000 piezas, pues a los dioramas que han venido desde Calazabanos, se han añadido otros nuevos, como una que evoca los yacimientos arqueológicos o una fantasía con hadas y bosques encantados. También han incluido nuevas escenas en su sección dedicada al cine y, por supuesto, una consagrada a episodios y personajes históricos de la villa de Astudillo, su nueva anfitriona.
Clicks y accesorios de la popular marca de juguetes que enriquecen con todo tipo de recursos: elementos articulados, luces e incluso complementos y piezas creadas con una impresora 3D. «No somos coleccionistas de los que acumulan, sino que primero pensamos el tema y después buscamos las piezas. Y, si no existen, las creamos», apunta Rubén de la Fuente. Como los cascos de los soldados de Star Wars o las figuras XXL que representan a personajes astudillanos como María de Padilla.
Un espacio para jugar
Cualquier niño o niña que recorra la exposición podría quedarse con las ganas de desmontar cada instalación para ponerse a crear sus propias historias… Pero que no esté permitido hacerlo no significa que sea una muestra estática: además de los QR que complementan la historia de Astudillo, se invita a localizar personajes y observar cada maqueta con detenimiento. Se anima a jugar.
Además, cada pocos meses se actualiza la exposición para que siempre haya detalles por descubrir. «Hemos visto que muchas familias regresan, de vez en cuando, de manera habitual», explican sus promotores.
Aunque Astudillo sea la nueva sede principal, estos villamurielenses continúan organizando actividades en su pueblo natal. Mientras, su nueva ubicación en el Colegio de los Salesianos (a quienes agradecen su generosidad al ceder el espacio) abrirá sus puertas los jueves del mes de agosto en horario de 19 a 20 horas. El resto del año, la apertura será los domingos por la mañana.
