La Organización Colegial Veterinaria (OCV) insta a sacar las cuestiones del bienestar animal del debate político porque aseguran que las granjas españolas están sujetas a “importantes medidas de bioseguridad y auditorías periódicas de bienestar animal por parte de la autoridad sanitaria”.
Así, con motivo de la celebración de la festividad de San Antón este lunes 17 de enero, la OCV defiende que el bienestar animal no es una cuestión ideológica sino una ciencia basada en criterios técnicos y objetivos.
En ese sentido, añade que la profesión veterinaria dispone de los conocimientos necesarios para evaluar el estado físico y mental de los animales, ya que hace referencia al estado biológico del animal, que se puede medir y evaluar a partir de estudios fisiológicos y de conducta de los individuos.
“Hay que sacar las cuestiones relacionadas con el bienestar animal del debate político e ideológico ya que es una ciencia que debe ser abordada desde el ámbito que le corresponde, que son los criterios técnicos y objetivos”, insisten los veterinarios en un comunicado remitido a Europa Press.
En relación con los animales de producción ganadera y después de la polémica suscitada por las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, subraya que las granjas y mataderos de España están “sujetos a inspecciones diarias y auditorías periódicas por parte de los veterinarios para obtener las certificaciones de bienestar, además de supervisar todo el proceso de transporte y distribución para garantizar las mejores condiciones de los animales”.
Asimismo, aseguran que España cuenta con “estricta regulación nacional y europea” respecto a las condiciones de las explotaciones pecuarias y añade que la Organización Colegial Veterinaria cuenta con un Comité de Bienestar que trabaja “de forma continua” en establecer protocolos prácticos tanto para animales de compañía como de granja. En es sentido, añade que esta labor debe mantenerse bajo criterios técnicos sin atender a “polémicas políticas o ideológicas ni a factores emocionales”.
Por otro lado, recuerda la labor de asesoramiento a los ganaderos sobre sus obligaciones en materia de sanidad animal, higiene y bienestar, que realizan los veterinarios en estas áreas fundamentales por su repercusión en salud pública y seguridad alimentaria.
Igualmente, insisten en que estos profesionales son responsables de controlar los alojamientos para confirmar que los animales viven en las mejores condiciones ambientales y de protección, resguardo, seguridad y confort, además de supervisar y asegurar que tienen una correcta nutrición, hidratación y relación con sus congéneres según la especie, edad y ciclo en el que se encuentre el animal.
Finalmente, la organización añade que para controlar la aparición de enfermedades y controlar las zoonosis, los veterinarios establecen planes preventivos a través de la vacunación, desparasitación y saneamiento del ganado; realizan evaluaciones de comportamiento de los animales; trabajan en la reducción del estrés; y son los responsables de la prevención y el tratamiento del dolor, entre otras muchas tareas.