Siguen el camino de los bomberos de la capital y encargan un sistema de excarcelación para accidentes de tráfico basado en esta tecnología
Pensar que lo que funciona a batería no tiene chispa, al contrario de lo que funciona por medio de un motor de combustión es algo que ha quedado desfasado. No solo hablando de vehículos, sino también en los aparatos que están llamados a sacarnos de los vehículos cuando se dé la fatalidad de sufrir un accidente.
Porque debido a la evolución de las baterías y de las herramientas esos útiles son igual de potentes y mucho más compactos.
Es lo que hace unos meses les llevó a los Bomberos de la capital a comenzar la renovación de sus útiles para excarcelación en caso de accidentes. Un camino que acaba de seguir ahora la Diputación de Palencia que acaba de encargar un primer equipo de excarcelación a batería, que será financiado con cargo a los fondos europeos.
Este nuevo equipo se caracteriza por ser más compacto y más ligero que los equipos que hasta ahora llevan los bomberos, explicaron funcionarios de extinción de incendios a Palencia en la Red, y en ningún caso se quedan atrás frente a los hidráulicos convencionales que usan ahora a la hora de abrir o tronchar estructuras y metales.
Estas herramientas no necesitan conectarse a una unidad hidráulica externa, esto es, no habrá que tender un tubo hidráulico o mover un generador de presión hidráulica hasta el punto de actuación. La generación de la presión hidráulica se efectuará en el interior de la herramienta y la fuente de energía será una batería de Ion-Litio.
Y en un caso extremo, esa herramienta se puede conectar a la red eléctrica, para tener una autonomía ilimitada, al tender un cable convencional.
Las herramientas
El nuevo equipo para los bomberos de la Diputación, que tiene señalados varios parques como especializados en este tipo de siniestros (Paredes, Saldaña, Aguilar y Baltanás son los que cuentan con vehículos de rescates varios) , estará compuesto por tres unidades de útiles.
Una cizalla, que tendrá una capacidad de presión igual o superior a 760 kN y un rango de apertura de hasta 20 centímetros; y tendrá un peso, sin baterías, de 18 kilos.
También habrá un separador, cuyas puntas están preparadas para el uso de cadenas y está especialmente diseñado para rescate en accidentes de tráfico y accidentes en edificios en los siguientes casos. Su capacidad para separar metales u hormigón, dado el caso, será de hasta 70 centímetros, ejerciendo una fuerza de 658 kN.
Por último, se incorporará un cilindro estampidor, con el que se pueden alcanzar distancias mayores de separación que con un separador. Tanto, que extendido puede servir para abrir un hueco de hasta 1,36 metros.
Todo ello acompañado de cuatro baterías y un cargador. Baterías con una capacidad mínima para actuar en circunstancias normales de rescate hasta durante dos horas, y a máxima presión durante media hora.
El precio que está dispuesta a pagar la Diputación son 33.057 euros, más IVA.
