La campaña “Farmacia Punto SOS” ofrecerá orientación y recursos a mujeres en riesgo, destacando la accesibilidad de estos servicios en zonas rurales
ICAL.
Castilla y León cuenta, en la actualidad, con 1.576 farmacias, de las cuales un 60 por ciento se ubica fuera de los grandes núcleos de población, por lo que son un recurso sanitario y social más accesible para el ciudadano. A partir de ahora, aunque es algo que ya venían prestando, las oficinas de la Comunidad se convertirán en lugares “seguros” y de “confianza” para la población, en concreto para ayudar y derivar a las mujeres víctimas de agresiones sexuales hacia el recurso más adecuado en cada caso. Gracias a la campaña Farmacia Punto SOS, con el lema ‘Seguridad, Orientación Siempre’, que se pone en colaboración con la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, la farmacia será un lugar de socorro, donde puedan acudir las víctimas para alertar de su situación de peligro, recibir orientación sobre dónde acudir si han sido agredidas o temen que vayan a serlo.
La presidenta del Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León (Concyl), María Engracia Pérez, aseguró hoy en Valladolid durante la presentación de la campaña que la profesión farmacéutica no quiere ponerse “de perfil” ante este “gravísimo” problema. “Nuestro papel puede ser crucial para anticiparnos, ayudar a prevenir agresiones y atender y orientar a las víctimas, si ya se han producido”, aseveró. Eso sí, dejó claro, según recogió la Agencia Ical, que no se trata de sustituir otros recursos “disponibles” e “imprescindibles” para las víctimas como los policiales, servicios de emergencias sanitarios o los centros Atiendo, ya que precisó que las farmacias buscan ser lugares de ayuda para “complementar y sumar” al orientar a las víctimas, aprovechando la “enorme” accesibilidad de las oficinas en la Comunidad, que es “profundamente” rural y con una dispersión de la población. Además, a partir de noviembre, todos los tickets de las farmacias llevarán impreso un código QR para que, una vez escaneado, se pueda entrar en el centro virtual Atiendo.
Por su parte, la vicepresidenta de la Junta y consejera de Familia, Isabel Blanco, reiteró el compromiso “irrenunciable” del Gobierno autonómico en la lucha contra la violencia de género, la detención de casos de agresiones sexuales, sensibilización y dotar de más recursos para ayudar a las mujeres, además de hacer hincapié en la formación de los profesionales y mecanismos de ayuda, a través del empleo, fundamentalmente, para que puedan normalizar su vida. Por lo tanto, aseguró que el convenio con el Concyl tiene plena cabida con la filosofía de la Junta en la materia. No en vano, recordó que Atiendo es un servicio de atención telefónica y virtual a víctimas de agresiones sexuales las 24 horas durante todos los días del año y que cubre el amplio territorio de la Comunidad. “Es una obligación y una necesidad poner esos recursos en el medio rural. El 48 por ciento de las mujeres vive en el medio rural y deben tener acceso a esos servicios de manera fácil, ágil y rápida”, aseveró.
Blanco añadió que, mientras llegan los recursos solicitados como el 1-1-2, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad u otro servicio especializado, la víctima que ha sufrido una agresión reciente será acogida en una zona de atención personalizada, para garantizar en un ambiente de confianza una escucha activa y se garantice una privacidad y una confidencialidad.
La campaña, que cuenta con una financiación de 120.000 euros procedentes de fondos Next Generation UE, recoge un protocolo de actuación para los casos en los que la víctima acuda a la farmacia acompañada de su agresor. Con una sencilla señal no verbal abriendo y cerrando la mano con el pulgar doblado sobre la palma de la mano, las víctimas podrán alertar a los profesionales de una situación de peligro.
Por otro lado, todo ello vendrá acompañado con soporte visual en las oficinas, a través de 1.700 carteles, publicidad digital en webs y redes sociales, o física, con mensajes en autobuses y marquesinas. También se imprimirán 40.000 dípticos informativos, que se entregarán en las farmacias y en los que aparecerán los protocolos de actuación ante casos de violencia de género y sexual.
María Engracia Pérez recordó que la Consejería de Familia y el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León comenzaron a colaborar en la lucha contra la violencia de género en 2017, a través de un convenio mediante el cual los farmacéuticos se formaron como agentes de detección y prevención. Posteriormente, durante la pandemia del coronavirus, lanzaron la iniciativa ‘Contra la violencia de género, Mascarilla 19’, mediante la cual las víctimas alertaban de una situación de riesgo al solicitar ese tipo de producto a su farmacéutico.
Recursos de la Junta
La vicepresidenta subrayó que Castilla y León cuenta con una Red de Servicios de Atención Integral a las Víctimas que actúa de manera permanente y eficaz y está presente en todas las etapas que atraviesan o pueden atravesar las personas afectadas, en el marco de la estrategia ‘Objetivo violencia cero’.
La herramienta principal de la Comunidad es el protocolo que recoge el proceso de atención integrada ante las agresiones sexuales, mediante el cual la Junta coordina a todos los profesionales que intervienen en la atención de las víctimas, fundamentalmente en las vertientes sanitaria, jurídica y psicológica. De hecho, cabe señalar que la asistencia letrada es gratuita, así como las consultas psicológicas necesarias para la recuperación de la víctima.
Un elemento clave para la prestación de todos estos recursos son los convenios de colaboración suscritos con los colegios profesionales de psicólogos, abogados y trabajadores sociales por un importe de casi 170.000 euros, destinados esencialmente a la formación especializada en violencia de género. Pero también se han venido firmando otros convenios centrados en la prevención y la sensibilización con el colegio de periodistas y entidades del Tercer Sector por un valor de más de 400.000 euros. Hasta septiembre de 2024 se han atendido a 331 personas gracias al servicio de traducción e interpretación para víctimas, 177 a través del servicio de información y asesoramiento jurídico a la mujer y 1.189 personas han sido atendidas a través del servicio de apoyo psicológico; de las cuales 882 han sido mujeres víctimas de violencia de género, 208 menores, 51 personas dependientes de víctimas de violencia de género y 48 personas han recibido tratamiento psicológico a maltratadores.
133 llamadas al teléfono Atiendo
Además, la Junta dispone del centro virtual ‘Atiendo’, una iniciativa pionera en toda España que consiste en un servicio de atención telefónica y virtual a víctimas de agresiones sexuales disponible las 24 horas durante todos los días del año, y que cubre todo el vasto y disperso territorio de Castilla y León. Se accede a través del teléfono 900 84 74 84 o la página web www.atiendojcyl.es. Precisamente, a través de esta web se han recibido 1.295 visitas y se han realizado 133 llamadas al teléfono gratuito, de las que 107 fueron de víctimas y 27 de familiares, allegados y amigos.