El entrenador asegura que pidió tiempo muerto a falta de cuatro segundos “para arañar algún punto” pero con “respeto para el rival”
Contento con el resultado del partido, el entrenador del Gran Canaria, Jaka Lakovic, reconocía que la mentalidad con la que su conjunto afrontó el encuentro era la “correcta”.
“Empezamos bien en lo defensivo y luego, partiendo de esa fortaleza, los han salido las cosas en ataque”, manifestó para, a pesar del resultado, mostrar una pega. “Un segundo cuarto donde hemos dejado de trabajar con la misma intensidad y concentración que en el primer cuarto. Nos fuimos al descanso con 10 puntos de ventaja, pero nos podríamos haber ido más cómodos”, vaticinó.
Y llegó el tercer cuarto: “Landesberg ha estado enchufado y hemos hecho diferencia que hemos aguantado”, hasta el final.
A preguntas de los periodistas canarios sobre el aprovechamiento de las 20 pérdidas de balón de los jugadores palentinos Lakovic ha defendido que más que demérito de los visitantes mucho ha tenido que ver su trabajo. “Nuestra intensidad y esfuerzo ha provocado esos errores y que Palencia no jugara cómodo, a lo que quiere jugar. La mayor parte del partido lo hemos conseguido y de estas pérdidas provocadas hemos tenido buena reacción corriendo. Hasta nuestros 5 han anotado en contraataque”, ponía en valor el entrenador esloveno.
Igualmente, preguntado por el hecho de que hubiera pedido tiempo muerto a falta de cuatro segundos cuando tenía una ventaja de 27 puntos, Lakovic ha reconocido que ha sido para tratar de “arañar uno o dos puntos más”. “Al final, les hemos dejado anotar algunas que podríamos haber aguantado más. Era por intentar sacar un punto más que podría venir bien. Nunca con falta de respeto a otro equipo o entrenador. Somos conscientes de que se juega a eso”. Finalmente ese tiempo muerto no tuvo premio, porque el Gran Canaria no anotó.
Justo (Zunder Palencia): “Los chicos han competido hasta el final. Eso es importante para nosotros”
