Los agentes la sujetaron por los tobillos y luego por las muñecas
Funcionarios de la Policía Nacional en León consiguieron frustrar ‘in extremis’ una tentativa de suicidio de una mujer con la que ya se había intervenido en ocasiones anteriores por intentos autolíticos.
La dotación fue requerida poco antes de la nueve de la mañana porque la mujer estaba enviando mensajes a un amigo en los que le manifestaba su intención de quitarse la vida. Con la máxima premura, un indicativo de Policía Nacional de atención al ciudadano se dirigió al lugar y comprobó que la puerta de la vivienda se encontraba cerrada. Junto con una patrulla de Policía Local, también presente, se inició una comunicación con ella a través de la puerta, que se negó a abrir en reiteradas ocasiones.
Ante la evidente situación de peligro, los agentes de la Policía Nacional decidieron acceder al interior de la misma y vieron a la mujer sentada en el alfeizar de una ventana completamente abierta y amenazando con tirarse al vacío si se acercaban. Los agentes iniciaron un diálogo con ella y lograron acercase y cuando se disponía a saltar al vacío, lograron asirla por ambos tobillos y con gran esfuerzo contener el peso de la víctima para evitar su caída.
Por último, un agente de la Policía Nacional se incorporó por fuera de la ventana, con evidente peligro de caer también al vacío debido a la falta de colaboración de la mujer, logrando agarrar las muñecas de la misma e introducirla dentro de la vivienda.
Una vez en el interior de la casa, fue atendida por los servicios médicos del 112 y posteriormente trasladada al centro hospitalario. La oportuna y eficaz actuación policial y del agente que arriesgó su vida para salvar la de la mujer permitió que el suceso no acabara en tragedia, señalan fuentes oficiales.
