La Administración autonómica informa a los alcaldes sobre los estudios para reintroducir esa especie
J. D. S. / ICAL
La Junta de Castilla y León aseguró hoy que el Plan de Recuperación del Lince Ibérico en Zamora “se hará con el necesario apoyo social”, según indicó la delegada territorial en Zamora, Leticia García. “Ahora, se está en la fase divulgativa para que todas las partes implicadas conozcan el proyecto y, por eso, la reunión con los representantes municipales de la zona y área limítrofe de los cañones del Duero, a su paso por nuestra provincia, es el comienzo de la comunicación del proyecto a la población local y al resto de sectores implicados, como agricultores y ganaderos o cazadores de estas comarcas”, explicó.
El territorio de los cañones del Duero, a su paso por la provincia de Zamora, es el lugar elegido, según los estudios realizados, para albergar poblaciones lince ibérico. El Comité Nacional de Flora y Fauna validó los trabajos técnicos que apoyan la reintroducción de esa especie, que desapareció en Castilla y León en la década de 1980.
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio reunió hoy a alcaldes de la zona de los cañones del río Duero y áreas limítrofes para informarles sobre los estudios realizados acerca de la reintroducción del lince ibérico en las provincias de Zamora y Palencia.
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“Este proyecto de recuperación del lince ibérico, según recoge el estudio técnico, es un eficaz controlador de otros depredadores, como el zorro o el meloncillo, dando como resultado que en los territorios donde se establecen poblaciones de ese felino, disminuye notablemente la densidad de otros depredadores, lo que beneficia a las poblaciones de especies cinegéticas de caza menor”, señaló la delegada.
“El lince no afecta significativamente a la ganadería extensiva, al estar en su dieta, de forma mayoritaria, el conejo, que causa importantes daños en el cultivo. Además, supone un motor económico derivado de las mejoras del hábitat y del auge del turismo de naturaleza”, añadió.
Aceptación del proyecto
El objetivo de la fase actual de comunicación es “evaluar la aceptación de este proyecto por parte de los alcaldes, vecinos, propietarios de los terrenos, agricultores, cazadores y ganaderos y, en su caso, con el apoyo de los agentes locales afectados avanzar en la materialización de este proyecto de reintroducción”.
La reunión contó con la presencia del jefe del servicio de Medio Ambiente de Zamora, Manuel Moreno, y técnicos de este departamento, así como el de Espacios Naturales, David Cubero. Los alcaldes citados fueron los de Almaraz de Duero, Andavías, La Hiniesta, Muelas del Pan, Pereruela, Roales, Villaseco del Pan y Zamora, como municipios para la posible reintroducción del lince y, por lo que se refiere a área de influencia, los de Carbajales de Alba, Fonfría, Losacino, Moral de Sayago, Palacios del Pan, San Pedro de la Nave-Almendra, Videmala y Villalcampo.
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El lince ibérico se extinguió en Castilla y León en la década de los ochenta o principios de los noventa del siglo pasado, coincidiendo con un importante declive en las poblaciones de conejos debido a la aparición de la denominada Enfermedad Hemorrágico Vírica, que atacó a las poblaciones de este pequeño mamífero a nivel mundial y castigó severamente a las poblaciones ibéricas, previamente mermadas por los efectos de la mixomatosis, llegando en muchos casos a la práctica desaparición del conejo silvestre en zonas donde era tradicionalmente abundante, según apuntaron fuentes de la Delegación Territorial de la Junta en Zamora.
El lince, que únicamente vive en España y Portugal, figura entre las catalogadas en peligro de extinción y estuvo al borde de su extinción global a principios de este siglo, quedando solo dos núcleos aislados, con menos de 50 individuos adultos. Desde 2002, los programas de conservación y reintroducción han permitido salvar de la extinción a esta emblemática especie de la fauna ibérica, que cuenta hoy con un censo los 1.668, con 326 hembras reproductivas.
