La población, atraer población. En esa dirección van algunas acciones impulsadas por Ayuntamientos del medio rural interesados en que su censo deje de adelgazar. Para ello, se activan iniciativas de lo más variopintas en algunos casos, y más ortodoxas, en otros.
Esto último es lo que se puede comprobar en Dueñas donde su Ayuntamiento se ha decidido a dar el paso, a poner en venta parcelas municipales para que sean particulares quienes se aventuren a construir su propia vivienda y de este modo asentar población.
Es una propuesta que tiene su parte de riesgo. Para ambas partes. Para el vendedor, el Ayuntamiento de Dueñas, que vende a particulares un suelo que, en otros tiempos, en plena burbuja inmobiliaria, una promotora le habría quitado de las manos.
De otro, el comprador asume también unos compromisos por los que se obliga a ejecutar en un determinado periodo de tiempo la construcción de su vivienda.
La adquisición de las seis parcelas de Dueñas en venta tendrá lugar mediante concurso público, en el que cualquier interesado podrá presentar una oferta. Para la valoración y determinación de las proposiciones y cuál de ellas es la mejor, se atenderá a varios criterios de adjudicación.
Los bienes que se enajenan deberán destinarse, única y exclusivamente, a la construcción de viviendas unifamiliares, no admitiéndose otro destino. Si no se cumple esta condición, procederá la resolución del contrato, revertiendo los bienes enajenados al Ayuntamiento.
El importe de salida, que podrá ser mejorado al alza, hasta el precio máximo que se indica, es el siguiente para cada una de las parcelas:
Con el objeto de que pueda llevarse a cabo la adjudicación del mayor número de parcelas, se permitirá que los licitadores establezcan un orden de prelación y precio de tal forma de que, de resultar superado por otro licitador el precio propuesto por una misma parcela, el licitador que ha quedado fuera da paso a su segunda opción en el precio propuesto en su oferta, y así sucesivamente.
