Javier Cortes. Butaca del Cine

EL CLÁSICO ENTRE LOS CLÁSICOS

Desayuno con diamantes (1961)

La escena que abre nuestro “Clásico” de este mes, acompañando los créditos iniciales, con las notas del inolvidable “Moon River” de Johnny Mercer y Henry Mancini, es una de las más recordadas de la historia del Séptimo Arte. Estoy seguro, que si hiciéramos una encuesta a nivel mundial para elegir a las actrices más icónicas del cine, en el top 3 estaría Audrey Hepburn. La citada primera escena de “Desayuno con diamantes” la convirtió en un referente universal de la moda y la interpretación.
El argumento gira en torno a la joven Holly Golightly (Audrey Hepburn), que vive en un apartamento, donde su extravagante vida la procura una aparente felicidad. A su mismo bloque, llega el escritor Paul Varjak (George Peppard) que sigue buscando un éxito que le permita independizarse de su representante -y amante- de la que depende económicamente. Cuando se produce el primer encuentro entre los dos, surgirá una chispa que cambiará sus superficiales vidas de forma inmediata.
Dirigido por Blake Edwards, este “clásicazo” imprescindible del cine -le pese a quien le pese- se basó en la novela “Breakfrast At Tiffany’s”, que Truman Capote publicó 3 años antes de que la adaptación se estrenara en los cines. 5 fueron las nominaciones a los Oscars de 1961 -incluyendo Mejor Actriz- y dos estatuillas las que se llevó -Mejor Música y Mejor Canción- y como digo, catapultó a Audrey Hepburn al Olimpo de la Interpretación, con el que seguramente fue, el papel más complicado de su extensa carrera. Papel que todo hay que decirlo, decepcionó y mucho a Capote, que quería a Marilyn Monroe como protagonista. Marilyn, rechazó el papel siguiendo las recomendaciones de Lee Strasberg, su profesor de interpretación, que no veía con buenos ojos que la “ambición rubia” diera vida a una prostituta que además coqueteaba con la marihuana -así era retratada en la obra escrita, aunque en la película, se las arreglaron para modificar el guión y ocultarlo a la censura-. Shirley MacLaine y Kim Novak rechazaron el papel por el mismo motivo. Algo parecido sucedió con George Peppard, que aceptó la interpretación tras rechazarlo uno de los actores más queridos y recordados, Steve McQueen. En su caso, fue por estar rodando otra película.
¡Hablemos del vestido más famoso de la historia del cine! Y no lo digo yo porque sí, recibió ese “título honorífico” en 2010. El diseño corrió a cargo de Hurbert de Givenchy y se inspiró en una colección de vestidos minimalistas presentados por Coco Chanel en 1925. Audrey lo utilizó hasta en 5 ocasiones en el film, siendo la primera de ellas la más recordada. Este Givenchy, alcanzó la cifra de 546.290 € en una subasta realizada en 2006.
Por último, deciros que otra de las escenas más famosas, cuando Audrey canta el “Moon River” en la repisa de su ventana, estuvo a punto de ser eliminada. Al parecer, un alto ejecutivo pensó que era una “canción estúpida”. Cuando el director Blake Edwards se lo comentó a Hepburn, ésta no dudó en contestar que se eliminaría “por encima de su cadáver”.
Una vez más, hay motivos de sobra para acercarse al cine clásico, con un largometraje que nadie debería perderse.
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La Ciudad Perdida (2022)

Sinopsis:
La novelista Loretta Sage (Sandra Bullock), fue capaz de traducir en su libro un jeroglífico de una lengua muerta. Esto hace que el millonario Abigail Fairfax (Daniel Radcliffe) la rapte para tratar de encontrar el tesoro de una ciudad perdida. Ahora, el protagonista de su novela, Dash McMahon (Channing Tatum) emprende un viaje en su búsqueda.
Opinión:
Un principio algo titubeante da paso a una historia de aventuras, con toques románticos y de comedia que tanto gusta producir a los americanos y que, todo hay que decirlo, con un guion muy sencillo, resulta entretenida y nada pretenciosa. Es más, para tratarse de la búsqueda de un tesoro, no ha hecho ni abuso de efectos especiales. Un mérito hoy en día. Un reparto de campanillas -Sandra Bullock, Charlie Tatum, Daniel Radcliffe… y el ¡HOMBRE! Brad Pitt- dan más atractivo a un film familiar, ideal para estos días lluviosos.
Lo mejor:
Consigue lo que busca, entretener.
Lo peor:
El humor de este tipo de películas sigue siendo bastante flojo.
Puntuación: 6/10

Vivarium (2019)

Sinopsis:
Gemma (Imogen Poots) y Tom (Jesse Eisenberg) han decidido comprar una casa. Cuando se citan con un inquietante agente inmobiliario éste, los lleva a una nueva urbanización donde todas las viviendas son iguales. Mientras les enseña una, el agente desaparece sin dejar rastro.
Gemma y Tom deciden irse, pero se dan cuenta que están metidos en un laberinto infinito que siempre los lleva al mismo sitio.
Opinión:
Esta es una de esas películas que prometen momentos inquietantes. ¡Y vaya si los tiene! Estridentes diría yo. El director Lorcan Finnegan (Sin miedo -2016-), confunde al espectador, con una aparente película de extraterrestres, que en realidad es una crítica, por decirlo de alguna forma, a los tiempos que estamos viviendo, donde cada vez más, se “firman contratos” acordes con lo que exige la sociedad actual. Entenderéis lo que quiero decir cuando veáis “Vivarium”. Sin querer dar spoilers, te vas a encontrar con un argumento diferente que deja una moraleja interesante.
Lo mejor:
Un guion original y realista.
Lo peor:
La parte central de la película, aunque necesaria, resulta un poco repetitiva.
Puntuación: 8/10

The Empty Man (2020)

Sinopsis:
En 1995, dos parejas que se encuentran de ruta por el Valle de Ura, en Bután, sufren un extraño suceso. En 2018, un ex-policia, se pone tras la pista de la desaparición Amanda, una joven que parece haber escapado de casa. Las pesquisas le llevan hasta su grupo de amigos, que tras poner en práctica una leyenda urbana en la que se invoca al “Hombre Vacío”, le harán sospechar que ese personaje siniestro está detrás de todo.
Opinión:
Se anunció como una de las mejores películas de terror de los últimos años -una más-, pero una vez vista, terror poco. Eso sí, la película tiene un guion con aroma a “slasher noventero” que tanto éxito tuvieron en su día -y que envejecieron regular tirando a mal- pero enfocado en una historia más seria y creíble. Problema esto último en algunas fases del film, que se enroca en conversaciones vacías por momentos que alargan en exceso su duración, que perfectamente se podría haber resuelto en 90 minutos. Con todo y con eso, el patrón que sigue, aunque a fuego lento, no deja nada en el tintero.
Lo mejor:
Por suerte, la película mejora con creces el tráiler anunciador.
Lo peor:
Estira demasiado la historia.
Puntuación: 6/10

Tenor (2022)

Sinopsis:
Un “golpe de suerte” hace que Antoine, un repartidor de sushi y gran beatboxer, lleve un pedido a la ópera. Cuando lo entrega, un pequeño roce con uno de los allí presentes, pone en alerta a Marie, que inmediatamente capta en el repartidor un gran talento en su voz. La vida de Antoine va a dar un giro radical.
Opinión:
Hay películas, que por algún motivo, nunca llegaré a entender, porque pasan desapercibidas para gran parte del público, ávido de descubrir propuestas diferentes y que hagan sentir al final, que ha valido la pena dedicar un tiempo de su día a verlas. “Tenor” es una de ellas.
Sí, puede ser que tenga un guion conocido y, si me apuras, “facilón”. Pero es que la mezcla de humor y drama es perfecta durante todo el metraje. Impecable y convincente en ejecución de principio a fin.
Lo mejor:
De una película que es capaz de sacarte una lágrima de emoción, poco más se puede decir.
Lo peor:
El guion, aunque convincente, es muy previsible.
Puntuación: 7,5/10
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