Hubo un tiempo, cuando llegaba la Semana Santa, que la reposición de clásicos religiosos y los péplum de relumbrón, conseguían retenernos en casa, pegados a una pantalla durante tres o más horas, casi sin pestañear. “Ben-Hur”, “Espartaco” o “La historia más grande jamás contada” eran imprescindibles en estas marcadas fechas del calendario. ¡Tiempos felices aquellos!.
Quo Vadis? nos cuenta la historia del regreso del Legado Marco Vinicio (Robert Taylor) tras varios años de campañas bélicas, a la Imperial Roma, gobernada entonces por el emperador Nerón (Peter Ustinov). Tras conocer a Ligia (Deborah Kerr), hija adoptiva de un general romano retirado, el Legado quedará prendado de ella, pero su amor no será correspondido por diferencias vitales. Mientras tanto, la “divinidad” Nerón intentará llevar a cabo su plan de levantar una nueva ciudad sobre las cenizas de Roma, que el mismo ordenará quemar y que, para librarse de culpa, acusará a los cada vez más seguidores del cristianismo.
“Quo Vadis?”, es una adaptación de la novela del escritor Henryk Sienkiewicz, y significa ¿a dónde vas?, en referencia a las palabras con las que Cristo dirigió a Pedro, cuando se le apareció huyendo de la matanza de cristianos de Roma, escena que por cierto, veremos en la película.
Ocho nominaciones a los Oscars tuvo el film que dicen, salvó de la bancarrota a la MGM. Una vez más e incomprensiblemente, no se llevó ninguno. Por suerte, Peter Ustinov si ganó el Globo de Oro por su icónica interpretación de Nerón. Hay personajes de cine que uno ya no puede imaginar con otro actor, -¿os suena un tal Hannibal Lecter?- Ustinov elevó su interpretación a los altares del Séptimo Arte. Oír hablar de Nerón o leer su historia, te lleva automáticamente a pensar en la cara del gran Peter Ustinov y quien ya haya visto la película, sabrá de lo que hablo.
Mervyn LeRoy -director también de “Mujercitas” (1949)- contó con una pléyade de estrellas que encabezaba el propio Ustinov, acompañado de la grandísima Devorah Kerr -De aquí a la eternidad (1953)-, Robert Taylor -Ivanhoe (1952)-, Patricia Laffan (la inolvidable y malvada Popea) o Leo Genn, dando vida a Petronio (nombre de mi gato, por cierto). A todos estos actores y actrices, hay que añadir la aparición, entre los extras, de los por entonces desconocidos Sofía Loren y Bud Spencer.
Inolvidable también, la banda sonora de un grande, Miklós Rózsa, candidato hasta en 16 ocasiones al Oscar y ganador de 3, entre ellos, por la banda sonora de “Ben-Hur” (1959).
Como siempre, estas “megaproducciones” de antaño, dejan muchas curiosidades. Amén de los impresionantes escenarios, 32.000 extras aparecieron en las casi 3 horas que dura la película -recuerda buscar entre ellos a Sofía Loren y Bud Spencer-, algo que el propio escritor, estoy seguro que no podría llegar a imaginar.
Peter Ustinov, fue el elegido para hacer de Nerón, entre otras cosas, por tener la misma edad entonces que el emperador al que daría vida. Para los papeles que interpretaron Devorah Kerr y Robert Taylor, se pensó en otra pareja de lujo, nada menos que Elisabeth Taylor y Gregory Peck, incluso Audrey Hepburn estuvo en la agenda para hacer de Ligia, pero no ser muy conocida en esos años, la apartó del reparto. Al final, el resultado, fue igualmente excepcional.
Me encanta decir que hay películas que uno tiene que ver al menos una vez en la vida. Esta, es otra de ellas.
La última lección (2018)
Sinopsis:
Pierre (Laurent Lafitte) llega a un instituto de alumnos superdotados para sustituir a un profesor que ha muerto trágicamente. Entre todos ellos, destaca un grupo que tiene unos hábitos especialmente llamativos. Pronto empezará a sentir una extraña mezcla de curiosidad e inquietud, que hará que comience a obsesionarse con los jóvenes, hasta el punto de seguir sus pasos lejos del centro escolar. Lo que va a descubrir, hará que la apacible vida del docente se convierta en un tormento.
Opinión:
La puesta en escena de “La Última Decisión“ es impactante desde el inicio. Sébastien Marnier dirige su segunda película. Una visión muy particular de los tiempos que estamos viviendo y los que están por venir, desarrollando un thriller bastante interesante, con trasfondo medioambiental, a través de los ojos de un grupo de jóvenes, que representan a la perfección algunas de las preocupaciones de su generación y con un profesor, representando a la generación anterior, con brillantez -y perplejidad en algún momento- que trata de entender actitudes que no son fáciles de asimilar.
Interesante y reivindicativa producción francesa, con otro de esos finales que dejan una lectura reflexiva. Llegará un día, que algunas imágenes que salen en esta película y que son reales, se empezarán a tomar en serio y no como una ficción.
Lo mejor:
La seriedad con que se enfoca el mensaje que trata de trasmitir.
Lo peor:
Falta de ritmo -que no de interés- en algunos momentos del film.
Puntuación: 7/10
Ni un paso en falso (2021)
Sinopsis:
Detroit, 1954, tres delincuentes que no se conocen entre ellos, son contratados para robar unos importantes documentos de la compañía “General Motors Corporation”. Una misión en apariencia sencilla si no fuera porque quien los contrató, los ha engañado. Ahora, quieren saber porqué eran tan importantes esos papeles y ajusticiar a quien les engañó.
Opinión:
Estamos ante la que, seguramente es la película más inteligente y pícara del pasado año. Steven Soderbergh filma este brillante homenaje al cine negro de los 50, basado en hechos reales y cuenta para ello con un reparto de lujo. Don Cheadle (Hotel Rwanda -2004-), Benicio del Toro (Traffic -2000-), Brendan Fraser (La Momia -1999-) o Matt Damon (Marte -2015-) entre otros. La historia, perfectamente ambientada en fotografía y vestuario, irá creciendo conforme van pasando los minutos, completando los personajes un círculo de dobles intenciones, que hace, que aunque en ciertos momentos vaya un poco lenta, no te permita despistarte para no perder el hilo, pues son varios los protagonistas a seguir. Además, los toques de humor ácido y los inteligentes diálogos hacen que, sin ser la mejor película de Soderbergh, seguramente, con el tiempo, será una de las más recordadas. Descubre la historia que cambió el mundo del automóvil.
Lo mejor:
El reparto estelar y los constantes -y brillantes- giros de guión.
Lo peor:
He echado de menos, viendo el desarrollo de la película, más minutos en pantalla de las actrices del reparto.
Puntuación: 8/10
La Sal de la Tierra (2014)
Sinopsis:
La vida de Sebastião estaba encaminada a acabar su carrera de economía. Pero tras conocer a Lélia Wanick, su futura esposa, huir del Brasil dictatorial de los años 60 y recalar en Francia, Sebastião descubrirá su verdadera vocación, la fotografía. Este documental, hace un repaso, a través de la cámara de Sebastião Salgado -reputado fotógrafo brasileño- de las últimas cuatro décadas, en los rincones más espectaculares e inhóspitos del mundo.
Opinión:
¿Preparados para un documental diferente que removerá conciencias? De todo lo que he podido ver este mes -y ha sido mucho-, me detuve como digo y por suerte, en este documental, de título llamativo y directores multipremiados, Win Wenders y Juliano Ribeiro Salgado. Las vivencias de Sebastião Salgado a lo largo de sus visitas a más de 100 países, quedan plasmadas y contadas por él mismo en los 110 minutos de metraje y os aseguro, que no decepcionará a nadie. Entre otras cosas, por comprobar en primera persona y dar la oportunidad al mundo entero de ver situaciones que a uno cuesta poder llegar a imaginar que puedan ser reales. Desde la belleza del Ártico hasta la crudeza del éxodo de millones de personas en Ruanda, prepárate para una experiencia que no olvidarás fácilmente.
“La Sal de la Tierra” deja además, una relevante reflexión final, muy acorde con los tiempos que vivimos, que da sentido a todo lo visualizado anteriormente.
Lo mejor:
La sentida narración en primera persona del protagonista y descubrir -para servidor al menos- una obra espectacular.
Lo peor:
Hubiera sido perfecto, haber incluido diálogos con gente con la que coincidió en alguno de sus viajes.
Puntuación: 9/10
El Método Williams (2021)
Sinopsis:
Richard Williams (Will Smith) es un padre de familia convencido de que dos de sus hijas van a dominar el mundo del tenis. Tal es así, que sin descanso, recorre todos los centros de entrenamiento tenísticos californianos pidiendo una oportunidad, para demostrar el talento que tienen sus pequeñas. Su insistencia tendrá su recompensa y será el inicio de un plan, minuciosamente calculado, para hacer de ellas un ejemplo dentro y fuera de las pistas, con métodos, a veces, no muy ortodoxos.
Opinión:
Pues por fin Will Smith se ha hecho con el premio que durante tanto tiempo lleva persiguiendo, el Oscar a Mejor Actor. En una noche que, perfectamente, podía haber ganado el premio a Mejor Actor de “reparto” -me entendéis, ¿no?-. ¿Es este su mejor papel? Honestamente, creo que no. “Ali” (2001), “En busca de la felicidad” (2006), incluso “Siete Almas (2008), tuvieron para mí algunas de sus actuaciones más memorables. Es cierto que en “El método Williams”, a tenor de las imágenes del final, en las que sale el verdadero padre de las tenistas, clava a Richard Williams. Físicamente al menos. Pero se dice que es una imagen, la que se da en el film, muy edulcorada del mismo.
Con todo y con eso, la película es un biopic entretenido de insistencia, superación, sacrificio, racismo y premio final, que aunque ya lo hemos visto muchas veces, es bastante redondo, en el sentido de que, muestra la historia de dos de la más grandes tenistas y eso, por si solo, ya debería despertar el interés del espectador. Por favor, no tengáis en cuenta a la actriz que han puesto para dar vida a nuestra Arancha Sánchez Vicario.
Ideal para ver en familia y enseñar a los peques de la casa sobre todo, que generalmente, nada en esta vida llega sin esfuerzo.
Lo mejor:
Descubrir el duro camino que recorre un deportista de élite hasta llegar a alzar un título.
Lo peor:
Serena, la que a la postre sería la denominada por quien entiende, la mejor tenista de todos los tiempos, tiene muy poco peso en la película.