El entrenador del Súper Agropal destaca la evolución del equipo corrigiendo cada día nuevos aspectos
Lo dijo en la previa del partido y lo consiguió ayer. Luis Guil y todo el Súper Agropal Palencia supo y pudo medirse a uno de los equipos con mayor presupuesto y aspiraciones de esta temporada. “ Ha sido un partido de control, de cara a cara con uno de los equipos top de la Liga”. Ha sido un muy buen partido, muy bien trabajado y muy bien, muy claro los objetivos que queríamos quitar”.
Wintering lleva al Súper Agropal Palencia al ‘Pórtico de la Gloria’
Entre ellos, reducir el acierto de Obradoiro en los tiros de tres por debajo del 40% y cerrar los rebotes. “Hemos vuelto a hacer más de 11 rebotes ofensivos cuando haremos el peor equipo en rebote de la liga”, apuntó Guil que explicó que para conseguirlo. “Yo también he tenido que cambiar alguna cosa que creía y quiero que ese cambio nos haya dado algo diferente ahora que es el rebote ofensivo, cosa que no dimos en el principio de temporada, que controlábamos muy bien el balance, controlábamos ciertas cosas bien, pero todo eso nos llevaba a no ir al rebote o no estar en el rebote”.
“Hemos ido poco a poco engranando las cosas, teniendo claro cómo queremos jugar y yo creo que hay muy buena conexión en el equipo, entre los jugadores, con el staff, el trabajo del cuerpo técnico, de todo el mundo para intentar que el equipo esté muy equipo y cada uno sabiendo de sus funciones”
Respecto a la influencia de Wintering en el devenir del último cuarto, Guil explicó que para eso se le fichó: “Tiene un rol importante, en este punto de momentos calientes de llevar el equipo. Esto ya lo hizo con Palencia y con Estudiantes el pasado año en la primera parte de la temporada. Es un jugador que además tiene absoluta confianza. En la primera parte ha hecho, ha acabado con menos 2, pero haciendo las cosas bien y ha seguido haciendo las mismas en la segunda parte, ahora con acierto y ha acabado dominando el partido, que es lo que ha hecho (…) Su madurez de juego cada día es más grande y la verdad que enhorabuena por eso”.
También tuvo que recurrir en más de tres cuartos del partido a Krutwig para detener a las torres gallegas. “No sé cuánto ha jugado ni lo he mirado. Ha jugado lo que he creído que tenía que jugar. No era un partido tanto para Mballa, porque es un pívot mucho más ligero, con pívot muy grandes, muy dominantes en la pintura y difícil para él. Por eso tengo que exprimir más el tiempo de Cameron, pero al final, esta liga es un partido a la semana.
Y siguiendo con los nombres propios, Oroz, al que en varias ocasiones durante el partido le pidió que tirara cuando estaba liberado. Guil explicó que, de momento, no puede ser el mismo de otras temporadas porque el club y los objetivos y la exigencia del mismo no son los mismos.
“Por primera vez Xavi sale de su entorno, de su casa, de sus jugadores. Es un jugador al que confío 100%, como le he dicho en el partido. Cuando me vuelva a pedir disculpas por jugar mal, vamos, le meto una ostia. Así. No quiero que me vuelva a pedir disculpas por jugar mal. Porque no jugó mal, porque hace cosas bien. Y tiene que tener la confianza para seguir jugando. Yo la tengo en él, que siga jugando. Cada que tenga un tiro, que lo tire”.
Es más, Guil reconoció que está “encantado con cómo está trabajando. Porque me da cosas totalmente diferentes a las que me da el resto de jugadores. Cada jugador tiene que aportar algo al equipo. Y Xabi nos da ese equilibrio, ese pegamento. Esas cosas que no se ven tanto, pero que nos lo da el equipo. De hecho, en el más/menos, hasta hoy, era un jugador de los que, con él en cancha, el equipo siempre ganaba. Es un jugador que va a seguir creciendo. Y esto es un deporte de equipo. Lo que me importa es el resultado del equipo en total. Que un día no acierta, no acierta; pero que siga tirando. Porque es un buen tirador. Yo confío 100% en él”.
