Se celebrará el 24 de agosto y se reconocerá a las escritoras vinculadas al municipio: Julia Estrada, Natalia Calle, Almudena Bustamante, Andrea García y Areños Consuegra
Guardo se prepara para celebrar el Día del Libro de una manera especial este 24 de agosto, con una serie de actividades que se llevarán a cabo a lo largo de toda la mañana. En un evento que contará con la participación de todas las librerías locales y la editorial Aruz Ediciones, los vecinos y visitantes tendrán la oportunidad de sumergirse en el mundo de la literatura.
Uno de los momentos más destacados de esta celebración será el reconocimiento a cinco escritoras vinculadas al municipio guardense. Julia Estrada, Natalia Calle, Almudena Bustamante, Andrea García y Areños Consuegra serán homenajeadas por sus aportaciones al mundo de las letras.
Será un día en el que se pondrá en valor la importancia de la lectura y la escritura en la vida de Guardo.
Julia Estrada: “Siento la gran desventaja que supone vivir en un pueblo cuando pretendes darte a conocer como escritora”
Es una escritora leonesa residente en Guardo, que con el sello M.A.R Editor ha publicado un libro de relatos “Otra tarde sin Mar” y la novela “Claroscuro”. Forma parte también del elenco de escritores de la Antología del Románico, publicada de la misma editorial.
Ha sido pregonera literaria del acto de entrega de premios del LII concurso Internacional de cuentos de Guardo.
Miembro de grupo literario guardense y de su jurado permanente, ha leído en el programa Sexto Continente de RNE, que dirige y conduce Miguel Ángel de Rus, varios de sus relatos más cortos.
Guardo celebrará el 24 de agosto el Día del Libro. Desde su punto de vista como escritora guardense ¿cómo de importantes son las celebraciones de este tipo de eventos para apoyar la industria literaria?
Eventos como este que organiza el Ayuntamiento de Guardo, no sólo son importantes para la industria literaria- en este caso para las librerías de la localidad y la editorial Aruz, que también participa en el acto- sino que contribuyen, y mucho, a dar visibilidad a los escritores que vivimos en los pueblos. Así que no podemos estar más que contentos y agradecidos con esta iniciativa que este año será para reconocer la labor de las escritoras locales.
En esta celebración se pondrá en valor el trabajo de cinco escritoras de la zona ¿Cuáles son los principales problemas o desafíos a los que os enfrentáis las escritoras que vivís en zonas rurales?
Pues mira, a los problemas y desafíos inherentes a la actividad que desarrollamos y a nuestra condición de mujeres, hay que añadir lo lejos que estamos del mundo cultural de las ciudades, mucho más rico en oportunidades de toda índole.
Yo tengo la suerte de publicar con un sello editorial (M.A.R Editor) que realiza una gran promoción de mi obra y con el que participio en algunas ferias del libro importantes, como lo son la de Palencia y Valladolid; pero a pesar de todo siento la gran desventaja que supone vivir en un pueblo cuando pretendes darte a conocer como escritora más allá del lugar en el que vives.
¿Qué medidas crees que podrían llevarse a cabo para fomentar vuestra visibilidad y la de vuestros trabajos?
Seguramente también es necesario que nosotros pongamos más de nuestra parte, puede ser; pero poder tener una mayor presencia en los colectivos culturales de la capital y en los medios de comunicación de Palencia y Valladolid- para los que somos prácticamente invisibles- sería muy importante.
¿Qué consejos les daría a otras personas que se encuentran en situaciones similares a la tuya, viviendo y escribiendo en entornos rurales?
Les diría que tomen buenas decisiones. Que resistan, persistan e insistan; pero que, como ocurre con otras muchas profesiones, si quieren tener proyección profesional, enriquecerse y mejorar su formación, si pueden, que se vayan. Porque el mundo rural se va vaciando también intelectual y culturalmente y son muy pocos los profesionales de cualquier rama ya sean médicos, profesores o ingenieros, que vivan en un pueblo tan alejado de la capital.
Con los que se dedican a cualquier disciplina artística ocurre lo mismo, y es la causa de que el tejido social que se está vertebrando en estos momentos en los pueblos, incluso en los más grandes, sea deslavazado, mucho más inconsistente que en tiempos pasados.
Soy consciente de que es imposible cambiar el rumbo de la historia y que, lo queramos o no, los pueblos seguirán vaciándose; pero para que la cosa mejore y haya más profesionales que se queden a vivir en el mundo rural, es preciso un mayor apoyo por parte de todas las instituciones, que vaya mucho más allá de los eslóganes.
