La iniciativa del Hospital Universitario Río Hortega busca capacitar a 1.000 profesionales en Valladolid para salvar vidas en emergencias cardiacas
En un esfuerzo por mejorar la respuesta ante emergencias cardiacas, 22 guardias civiles y dos militares del Ejército del Aire participarán en el primer curso de ‘Monitores en soporte vital básico y manejo del desfibrilador semiautomático (DESA)’ en la provincia de Valladolid. Este curso tiene como objetivo extender los conocimientos en estas técnicas a un total de 800 guardias civiles y 200 profesionales del Ejército del Aire.
La formación de los formadores está coordinada por la doctora Rosa Ibán, responsable de Docencia en el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, y cuenta con la colaboración de profesores del Instituto de Ciencias de la Salud de Castilla y León (ICSCyL). El curso se enfoca en dotar a los alumnos de las habilidades necesarias para reconocer y actuar ante una parada cardio-respiratoria, mejorando así la atención en urgencias y emergencias, y fortaleciendo la cadena de supervivencia.
Desde 2009, el ICSCyL ha sido un pilar en la formación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en resucitación cardiopulmonar (RCP). Este programa, que comenzó en Soria y se expandió gracias al apoyo del teniente coronel Andrés Velarde Tazón, ha capacitado a guardias civiles en Salamanca, León, Zamora, Burgos y Palencia. El proyecto también se ha extendido a otras comunidades autónomas, incluyendo La Rioja, Cataluña, Madrid, Aragón, Murcia y recientemente la Comunidad Valenciana, formando a aproximadamente 8.800 agentes a través de 736 cursos.
El ICSCyL mantiene un riguroso control de calidad en la docencia mediante evaluaciones constantes. Ha desarrollado una plataforma de formación online que facilita la gestión y evaluación de los cursos, tanto por parte de los monitores como de los alumnos. Además, el instituto realiza investigaciones para determinar la efectividad de la formación y la necesidad de reciclajes periódicos.
Con el respaldo de datos del Consejo Europeo de Resucitación (ERC), que revelan que cerca de un millón de europeos sufre anualmente un episodio de muerte súbita, principalmente debido a enfermedades cardiacas, este curso se presenta como una iniciativa crucial. En España, 25.000 personas mueren anualmente por muerte súbita cardiaca, con la mayoría de estos casos ocurriendo fuera del hospital. La desfibrilación temprana es clave para la supervivencia, y el DESA ha demostrado ser un avance significativo en las técnicas de soporte vital.
La implementación de este programa de formación avanzada tiene el potencial de convertirse en un modelo nacional, subrayando la importancia de la capacitación en técnicas de soporte vital para salvar vidas.