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Las gradas del municipal vibraron con un partido intenso, propio de otra categoría, y la victoria del Súper Agropal Palencia

Todo camino es duro. Desde Roncesvalles a Santiago, pasando por Palencia. Dicen que el palentino es uno de los tramos más exigentes del Camino. De Itero de la Vega a San Nicolás del Real Camino y por ello, algunos peregrinos se lo saltan. Pero los que viven el Camino también afirman que es en este tramo casi llano, con kilómetros a la redonda de horizonte, donde los caminantes se encuentran. Miran a su interior. Pueden reflexionar y salir con las convicciones más fuertes. Como ayer le pasó al Súper Agropal Palencia y a su afición.

Wintering lleva al Súper Agropal Palencia al ‘Pórtico de la Gloria’

Porque ante el tramo que les tocaba la pasada noche, algunos pensaron en la derrota. En coger el bus en Burgos y lanzarse a León. Sin embargo, apretaron los dientes, encararon el Camino y animados por el himno a Palencia dieron el primer paso para ganarse el jubileo completo. Un paso, una canasta; otro paso, un grito de ánimo; otro paso, una gran defensa; otro más, un cántico animando a todo el Pabellón. Juntos, equipo y afición, observando también la fauna del Municipal de Palencia.

Porque quizá muchos no se dieran cuenta anoche, pero durante los parones por los fallos del reloj de posesión, desde la parte alta del Municipal se podía ver a un murciélago sobrevolando, a sus anchas, al respetable.

Lo cierto que es que el partido fue de los más intensos, ajustados y trabajados que se han visto en el pabellón de Palencia en los últimos años. Un duelo de otra categoría. No en vano, estos dos equipos, el palentino y el santiagués se midieron el pasado año en la ACB.

Con los traspiés propios de un camino tan largo como los 40 minutos de un partido, con los repechos que de vez en cuando levantaba el Obradoiro, el pabellón de Palencia fue acercándose a su destino. Al Jacobeo. Primero al monte do Gozo, llevados de la mano de Wintering.

Finalmente a la plaza del Obradoiro, con un mate de Kamba que puso patas arriba al Pabellón y certificaba la victoria del Palencia ante uno de los equipos top.

Y más aún, convencía a muchos de que este Súper Agropal puede plantarle cara a cualquier equipo. Algo que se olvidó la temporada pasada, pero que ahora se vuelve a repetir en una noche como las de antes.

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