La exposición de Marina Escudero, que se inaugura esta tarde en la Biblioteca Pública, rinde homenaje a Esperanza Pérez Zamora, la palentina que fue pionera en la exhumación de fosas. La muestra forma parte del ciclo expositivo del curso Proyecto Fotográfico, de la UPP
Marina Escudero, periodista palentina con una fuerte vocación por la información social, ha recorrido mundo buscando historias. Como la que inspiró su exposición de fotografía documental ‘Dabber Bhata’ en 2019, sobre las condiciones de los trabajadores de una fábrica de ladrillos en La India. Esta vez, Marina ha encontrado su historia más cerca de casa y de manera casual.
«En mis viajes siempre me ha interesado las consecuencias de la guerra, y me di cuenta de lo poco que sabía sobre la guerra en mi tierra, Palencia». Se acercó a la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica y allí le hablaron de Esperanza, la palentina que abrió la primera fosa común en España para encontrar los restos de su padre. A ella le dedica esta exposición, surgida de su paso como alumna de Luz Marina Muñoz en el curso de Proyecto Fotográfico de la Universidad Popular de Palencia.
«Esperanza Pérez Zamora me invitó a su casa y me contó su historia. Mataron a su padre, a su tío y a sus dos abuelos. Su madre huyó como refugiada a Francia y a Bélgica, con Esperanza chiquitita. Regresó en el 77 con la firme intención de encontrar a su padre». Investigó hasta dar con su asesino, que aún vivía en Villamuriel de Cerrato. «Se presentó en su casa y le espetó: ‘‘dime dónde está mi padre, o te mato’’», cuenta Marina Escudero. Y la condujo hasta el lugar del cementerio donde se situaba la fosa, que desenterró ella misma «con la Guardia Civil apuntándole a la cabeza».
Tras conseguir el sueño de encontrar el cuerpo de su padre, decidió buscar a sus abuelos y su tío. Y también lo consiguió. Fue así como sembró el germen del movimiento de la recuperación de la Memoria Histórica, porque se interesó también por conocer quiénes eran las otras personas que halló en las fosas que recuperó. «Empezó a hacerse conocida por la labor que estaba realizando sin ningún tipo de apoyo y muchas personas le pedían que buscara a sus familiares».
Dar esperanza a los familiares de los fusilados
Esperanza consiguió exhumar los cuerpos de las fosas de Villamuriel de Cerrato, Valdespina, Villamediana y Magaz de Pisuerga, localizando a más de un centenar de fusilados. «También ayudó a las familias en esa parte burocrática de reconocimientos y prestaciones que venía después», detalla la periodista, que ha acompañado a Esperanza hasta todos esos lugares para fotografiarla en este proyecto: Valdespina, Magaz, Villamuriel, Villamediana y Valoria La Buena. Marina explica que en este pequeño viaje fotográfico se ha dado cuenta del miedo y tabú que existe todavía sobre esta cuestión. «Ese dolor y ese miedo está muy en la piel, lo noté en Esperanza y también en su familia».
La exposición podrá verse en la Biblioteca Pública del 7 al 14 de marzo, y después se mostrará en la UPP y en el centro cívico José María Fernández Nieto. Forma parte de un ciclo expositivo de los alumnos de Proyecto Fotográfico.
También este mes es posible conocer un proyecto de la profesora de este curso, Luz Marina Muñoz, denominado ‘Eran Semillas’, un herbario fotográfico de las plantas silvestres que crecen sobre fosas comunes que existen sin abrir en el territorio de Castilla y León. «A día de hoy, muchos familiares aún ignoran el paradero de sus seres queridos. El objetivo principal de este proyecto fotográfico, es mitigar el dolor que la ausencia produce en las familias de los Desaparecidos, mediante la resignificación en clave botánica de los lugares de inhumación y de la vida que florece en ellos», explica la profesora de la UPP, que presenta su trabajo en la Biblioteca, el 17.
Semillas que Esperanza supo recoger a tiempo para sembrar luz en el corazón de centenares de familias de todo el país.