El candidato al Congreso de los Diputados por SUMAR Palencia defiende la introducción del vector rural en legislaciones vinculadas con el sector primario, la vivienda y la “rentabilidad social” de las empresas de los pueblos
Bueno, en esta ronda de entrevistas estamos poniendo el enfoque de las políticas estatales en nuestro territorio, en la provincia de Palencia. ¿Qué diagnóstico hacen ustedes, desde Sumar Palencia, de la situación de la provincia y del impacto que han tenido las políticas estatales? Porque hablaba en declaraciones a otros medios, señor Paniagua, del abandono de Palencia como consecuencia del bipartidismo
Pues bueno, yo creo que sí, llevamos décadas abandonados a la mala suerte, porque Palencia es una de las provincias de Castilla y León que lidera la pérdida de población desde hace unas cuantas décadas. Y eso significa, por una parte, que ni las políticas de ámbito nacional han tenido impacto, ni los 35 años del Partido Popular gobernando en Castilla y León tampoco ha tenido impacto, porque si no, no estaríamos como estamos, ¿no? Nuestra campaña hemos girado en torno a al gran problema que tiene la provincia, que es la despoblación. Bueno, incluso la capital también, porque va perdiendo jóvenes y mujeres que se van a otros lugares a buscar trabajo.
Es un síntoma, un sentir de mucha gente, de que la capital y la provincia cada vez va a menos. Por eso nuestro nuestro programa va dirigido sobre todo a aterrizar esas políticas aquí a la capital de la provincia. O sea que después, si quieres, desgranamos un poco con más detalle algunas cuestiones…
Sí, porque precisamente, ya que menciona la despoblación, en el programa de Sumar viene contemplada en un apartado concreto y dice: “Se debe reconocer la enorme contribución de los habitantes del medio rural al conjunto de la sociedad como cuidadores del territorio y de su biodiversidad”, y habla, además, de la voluntad de buscar un mundo rural vivo. ¿Qué tipo de políticas pueden hacer esto? Porque es verdad que muchas veces se habla de ello, pero no se acaba de concretar
Está claro que una de las políticas más generales que se han aplicado en el medio rural ha sido la Política Agraria Comunitaria, y eso, evidentemente, ha determinado un modelo, un formato de territorio y de gestión del mismo, ¿no? Nosotros lo que queremos cuando lleguemos al Gobierno es acordar un gran pacto de Estado, igual que se han acordado Pacto de Estado por la sanidad, por la prevención de la violencia de género… Nosotros entendemos que hay que hacer un pacto de Estado, un gran pacto de Estado para el medio rural, que esté dotado económicamente bien, que tenga bastante financiación, porque si no, al final el pacto se queda en agua de borrajas.
La cuestión es que la despoblación demográfica no es una cuestión que afecte solamente Palencia, Castilla y León, sino a otras muchas zonas rurales de nuestro país. Entonces es un problema muy generalizado, o sea, no nos afecta a nosotros directamente. Entonces, de ahí apostar por un pacto de Estado que esté dotado financieramente, con financiación importante, y que dé respuesta a las verdaderas necesidades que tiene el medio rural. Aquí hay que cerrar brechas, hay que cerrar brechas a todos los niveles y las brechas, estamos hablando de, en muchos lugares, no hay banda ancha. En muchos lugares los servicios básicos de proximidad, por ejemplo, si se cierra el bar, se cierra la peluquería, se cierra la panadería… Y después está toda la parte de derechos: consultorios médicos, escuelas, colegios, bibliotecas, servicios culturales.
¿Y aquí qué pasa? Durante décadas, el Partido Popular, que es el que ha estado gobernando mediáticamente en esta comunidad autónoma, siempre ha asociado que los servicios públicos tienen que estar vinculados a una rentabilidad económica y algunos sitios por la baja densidad de población. Es imposible que haya esta rentabilidad económica. O sea, hay cuestiones que no son sostenibles económicamente, pero sí que tienen que ser sostenibles socialmente.
Precisamente es un recurso que están usando en esta campaña. Esa sostenibilidad, esa rentabilidad social
Rentabilidad social: que en un pueblo, si hay un bar abierto, que ese bar pueda tener financiación del Estado para poderse sostener, pues entendemos que tiene una rentabilidad social. O sea, un señor que vive en un pueblo de 100 habitantes, ¿cuántos cafés puede vender al día? ¿Es sostenible económicamente? No es sostenible, técnicamente, pero la función que ejerce ese bar en la comunidad es súper importante, porque es un elemento de socialización. La gente va allí, se encuentra, se ve, se pregunta ¿oye, qué tal estás? Oye, que hace dos días que no te he visto, ¿dónde has andado? Hay determinados eventos que son rentables socialmente y aquí el Partido Popular, con las políticas mercantilistas que ha aplicado de derechos, pues es que eso tiene que cambiar alguna manera.
Citaba la Política Agraria Comunitaria. Precisamente últimamente ha habido reformas ligadas a las nuevas directivas europeas dotadas de financiación y en el programa de sumar que encabeza Yolanda Díaz también se habla de esa transición agroecológica. ¿Eso puede entrar en conflicto? A veces se ha dicho desde otros partidos que puede haber un conflicto entre la economía, el crecimiento y esa transición agroecológica que también en nuestro territorio es especialmente importante
Sí, bueno. Y lo hemos visto en las OPAs, pues el tema del Pacto Verde Europeo no es algo que les guste mucho, porque la Política Agraria Comunitaria en este nuevo periodo de la PAC, del 23-27, pues evidentemente cambia el formato y hay determinadas cuestiones que antes se podían hacer y ahora no se pueden hacer y está evidentemente el sector bastante revolucionado, pero eso es una política agraria que nos viene impuesta por ser Estado miembro de la Unión Europea. Tenemos que asumirlo. ¿Desde aquí qué es lo que podemos hacer? Pues tender a elementos de transición energética, transición ecológica, de que ellos, los ganaderos y los agricultores, como personas que custodian el territorio, pues habrá que cambiar determinados hábitos, porque bueno, pues también se contamina. Y habrá que reducir esos impactos medioambientales, porque estos días estamos pasando un calor que… El que niega el cambio climático pues yo creo que vive en otro planeta, porque estas temperaturas y todo lo que estamos viviendo pues no es ni medio normal.
Ellos, como custodios del territorio, también provocan impactos medioambientales y tienen que ser conscientes de que, al ser cuidadores de esos territorios, pues tienen que reducir esos impactos en la medida de sus posibilidades y sobre todo, tender hacia otros modelos más sostenibles y ecológicos.
Y si un agricultor le escucha en estos momentos, dirá: ¿y quién me lo paga? Es decir, ¿plantean que haya un acompañamiento económico con financiación, subvenciones, que la PAC se reoriente…?
Ahora mismo España, ya como Estado miembro, ya ha aprobado su plan estratégico y lo tiene que llevar a cabo y ha asumido unos compromisos que tiene que asumir. Después podrá haber normativas nacionales, que algunos casos habrá que negociar con los sindicatos, con las OPAS, para ver en qué medida eso se puede… No minimizar, porque viene impuesto, porque si a ti te dotan económicamente para llevar a cabo unas políticas, pues tienes que asumir esos compromisos. Entonces, bueno, pues estamos echando a andar, empieza ahora. Yo creo que buscar el acuerdo, el diálogo permanente con el sector, es importantísimo y sobre todo, más que la agricultura, la ganadería, que ha sido pues eso, un sector muy azotado. O sea, cada vez más explotaciones no son rentables económicamente, no son productivas.
Aquí, yo que conozco bien la zona de Tierra de Campos, en los últimos años han cerrado un montón de granjas de ovino. También hay un tema asociado a la productividad, que es el tema del relevo generacional por una parte, y después la falta de mano de obra en muchos casos. Hay ese sector que ha estado muy castigado y también está muy estigmatizado el que tienes que estar 24-7.
Pero bueno, se pueden ir a modelos de gestión. De hecho, en la entidad en la que yo trabajo colaboramos con una asociación de ganaderos de ovino que está trabajando en un proyecto de investigación sobre todo relacionado con el tema del relevo generacional y cómo intentar que esas granjas no se cierren, porque ahí producen leche, queso, etcétera, productos alimenticios que comemos todos los días y están buscando fórmulas para ver de esa manera cómo pueden ser sostenibles.
En Madrid sobran 1 millón de personas. En Madrid sobran 1 millón de personas y hay muchas, muchas personas, que están deseando marcharse de allí. Entonces, bueno, si ahí podemos hacer una buena gestión de esos recursos, esas personas que quieren venir aquí con formación, dándoles vivienda, que es otro problema…
Precisamente en materia de vivienda, al final de esta décimo cuarta legislatura se ha aprobado una ley, que además lleva el sello de Yolanda Díaz, también dentro de esa nueva normativa, se reconoce el problema de la vivienda en el medio rural, y hablan de que no hay oferta, pese a ver casas vacías. ¿Cómo debe apoyarse esto desde el Estado? Porque es verdad que en esta ronda de entrevistas muchas veces los alcaldes lo han dicho: tengo muchas ruinas, pero no tengo herramientas. Entonces, si la legislación estatal está reconociendo esto, ¿al menos qué propone Sumar para dar un impulso a esto?
Bueno, sabes que el PSOE en la Ley de Vivienda, pues no apoyó lo que tenía que apoyar, entonces la aprobó, sí, vale, pero esa ley necesita ser más ambiciosa y necesita ser ambiciosa y meter el vector de la vivienda rural. O sea, no podemos hacer la comparación con Palencia, por ejemplo, o irte, yo que sé, a un pueblo de Tierra de Campos, que puede ser pues cualquiera que tengamos ahí, no mucho, por ejemplo, no lo puedes comparar.
No es comparable la situación de la vivienda en Palencia que en Castromocho, y el vector de lo rural lo tenemos que introducir. Los ayuntamientos tienen que tener más capacidad legal para poder expropiar ante situaciones de ruina en la que una calle, una casa que se está cayendo, te está generando un problema en el municipio, y no sabes dónde ir para que esa casa pues se arregle o se tire. Y los ayuntamientos te lo dicen, es que en algunos casos les es muy complicado localizar a los herederos porque a lo mejor son mucha gente, muchos hermanos y es muy complicado. Esos casos se alargan… Creo que tendría que tener más capacidad ejecutiva los ayuntamientos para poder actuar en ese campo y, sobre todo, dar ayudas a la rehabilitación de la vivienda, porque es importante que si queremos atraer jóvenes al medio rural o que se queden en su pueblo a vivir, si no tienen casa, pues evidentemente se van a marchar.
Precisamente habla de jóvenes. Usted estudió Educación Social aquí en el Campus de Palencia. Vive aquí, ejerce aquí… No todos nos hemos ido, o en algunos incluso hemos vuelto.
Efectivamente, yo me fui y volví.
Eso hay que apoyarlo desde políticas a nivel del Estado, a nivel autonómico y local también. ¿Qué propone Sumar para que provincias de escaso peso a nivel estatal no tengan ese destino?
Una medida que llevamos, y que se ha anunciado durante esta campaña, es la herencia universal dirigida a aquellos jóvenes que cumplen los 18 años, de 20.000 €. Y creemos que con esto estamos llevando a cabo una igualdad de oportunidades para el colectivo juvenil.
¿En qué consiste la herencia universal? Bueno, pues en el momento que los jóvenes alcancen la edad de 18 años, esa cantidad que se les va a dar les puede servir para formarse, para iniciar su andadura profesional, para independizarse, ¿no? Fijaros aquí en Palencia, la provincia: ahora mismo hay cerca de casi 1500 jóvenes en esa franja de edad y esta. Esta medida en Palencia tendrá un impacto de 29 millones de euros. Lo que tenemos que hacer es darla a conocer. Y si gobernamos el día 23 de julio, poner en marcha, legislarlo.
Y evidentemente el otro día me preguntaban: “No, es que no estoy de acuerdo, porque claro a cualquiera los 20.000 €…” Hombre, pues eso. Pues habrá que hacer una regulación, unos procedimientos, porque evidentemente no es lo mismo cómo sea la cartera de tus padres o de tu familia. Pasa igual con las becas. O sea, no todo el mundo recibirá una beca. O sea, está claro que reciben más la gente que tiene menos recursos económicos. Entonces, si queremos potenciar eso, tiene que ser del Estado. Palencia necesita que el talento joven se quede, que no se vaya, o sea que se quede aquí, porque si se va, pues todo ese conocimiento no queda en el territorio y esto cada vez se va empobreciendo más y hay pocas empresas innovadoras que apuesten en el territorio y de esa manera, apoyando a los jóvenes con esa cantidad, entendemos que puede ser un buen revulsivo para no pensar en ese mantra de decir “hijo o hija, vete de aquí, que aquí no hay oportunidades ni tienes futuro”. Pues bueno, pues que ese mantra desaparezca y que a través de esta herencia universal promovida por el Gobierno, pues podamos minimizar el impacto.
Y luego apoyo al empleo también, después, porque si conseguimos más o menos seducir a esa gente joven para que se quede, también tienen que encontrar después un empleo.
Claro, si hay gente, pues hay movimiento y actividad. Bueno, pasamos por la Calle Mayor y da pena. Está claro que cada vez hay menos masa crítica, ¿no? También los hábitos de consumo han cambiado, que es cierto, pero hay gente yo creo que con ideas innovadoras, gente joven, que puede perfectamente todo ese conocimiento dejarlo aquí, porque muchos chavales jóvenes se van a vivir a Madrid, están viviendo en pisos compartidos, cobrando un salario precario… ¿Y merece la pena estar en Madrid en esa situación y no estar en tu tierra? Que bueno, que yo digo que la gente no se vaya. Vete, pero vuelve si quieres volver.
Cambiando un poco de plano: Palencia elige tres diputados para el Congreso. Habitualmente el baile es dos para el PP, uno para el PSOE y viceversa, salvo algún caso muy concreto. ¿Cómo valoran esto desde Sumar? No sé si el sistema electoral es reduccionista y nos afecta de alguna manera a esa pluralidad que luego está en la calle.
Bueno, el voto de Sumar decimos que es el voto decisivo. ¿Y por qué es el voto decisivo? Pues porque el tercer escaño en Palencia lo vamos a disputar con la ultraderecha. Y entonces, pues es importante que la clase trabajadora palentina se movilice el 23-J y vayamos a votar en masa.
Está claro que el voto de Sumar lo que va a hacer es contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas y ahí tenemos medidas políticas que hemos puesto en marcha. Np tenemos que decir “es que vamos a hacer”, no: es que ya hemos hecho, hemos aplicado una reforma laboral, hemos puesto en marcha el Ingreso Mínimo Vital, hemos llevado a cabo la subida de las pensiones, hemos también hecho ayudas al transporte y a los combustibles, todo lo que tiene que ver con la factura de la luz por la excepción ibérica, el precio del gas… Y esto mejora la vida de la gente, de las personas.
Y esto lo tenemos que decir la gente. No se puede decir que durante estos cuatro años de gobierno de coalición no se ha hecho nada. Porque no es verdad. O sea, eso hay que ponerlo de manifiesto. Se ha gobernado en unos momentos de la historia críticos: una pandemia, una guerra, el tema de los incendios… O sea, cuando el gobierno aterrizó, automáticamente a los dos meses o menos de dos meses, estábamos todos en casa gestionando una crisis que nadie sabía qué es lo que iba a suceder.
Y el gobierno activó un escudo social para ayudar a las familias, para que la gente no pierda el puesto de trabajo a través de los ERTE. O sea, eso no puede pasar desapercibido. No podemos olvidarlo. No podemos tener una memoria tan a corto plazo como para decir no ha pasado nada, no, aquí ha pasado que se ha ayudado a la gente, se han ensanchado los derechos y el proyecto de Sumar pues es a largo plazo, es de ocho años. Por eso, el que la gente vaya a votar el 23-J y vote a la izquierda es súper importante para continuar y reeditar el gobierno de coalición con el PSOE.
Está clarísimo. Y también te quería decir que no se nos olvide que Sumar pone pie en pared a la ultraderecha, porque lo que no podemos hacer es volver, como ya ha dicho el señor Aznar, a la austeridad, a apretarse el cinturón, a reducir derechos. Lo estamos viendo aquí en Castilla y León. ¿Qué es lo que está haciendo el pacto de PP y Vox? Lo primero que ha sido es atentar contra los derechos de los trabajadores, cargarse el SERLA, el diálogo social… Hace unos días con el tema de la cultura… O sea, atentan directamente con los derechos de las personas.
¿En qué país vivimos? Nosotros queremos un país en el que la gente sea feliz, que viva a gusto, tenga calidad de vida, tenga esperanza y sobre todo, que esté bien, en condiciones, como para poder decir “vivo en un país en el que estoy orgulloso y en un país en el que no estoy perseguido porque soy gay o lesbiana”.
Podemos ver un gobierno de coalición entre el Partido Popular y Vox. ¿Le preocupa que la ultraderecha esté sentada en el Consejo de Ministros?
Que Santiago Abascal sea el vicepresidente del Gobierno, pues creo que sería una noticia el 23 de julio bastante triste para toda la ciudadanía, sobre todo porque, a partir de ahí, vamos a entrar en una España en blanco y negro. Una reducción de derechos cuando nosotros lo que queremos es respetar los derechos y sobre todo los derechos de la clase trabajadora, de las clases más humildes, de la gente que no tiene oportunidad. Ensanchar los derechos de todos, pero especialmente de los más desfavorecidos. Y nos podemos encontrar la mañana del 23 de julio con un panorama totalmente diferente.
Un país totalmente diferente, porque ya han dicho que van a derogar no sé qué y no sé cuál. Bueno, no sé, yo no quiero ese país para mis hijos. Una de las cuestiones principales por las que yo he dado el paso adelante para presentarme la coalición de Sumar, es que mis hijos quiero que vivan en un país libre, plural, feminista, diverso. Yo quiero eso para mis hijos que viven en Palencia y para todas las familias. Evidentemente yo no quiero vivir en un país en el que esté perseguido por mi condición o porque sea inmigrante y tenga que aterrizar en Palencia buscándome la vida, porque he tenido que salir de mi país de una guerra, pero aquí estoy, perseguido por ser inmigrante, no tengo papeles. Cuando además nosotros hemos sido un país de emigración en la Dictadura, o sea que también tenemos una memoria que a veces parece una amnesia. Bueno, se nos olvidan las cosas, no tenemos historia.
*Transcripción de la entrevista que puedes ver en vídeo