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Derrota por 94-101 del equipo morado en un disputadísimo partido que deja sin opciones de ascenso al conjunto colegial

La expulsión de Luis Guil y las constantes protestas a los árbitros por parte de la grada local fueron la tónica general durante un partido que el Zunder llegó a ganar de 17 puntos

ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO

Llegar vivos una semana más. Es decir, vivir o morir. Esas eran las expectativas que se planteaba Luis Guil para el partido que enfrentaba al Zunder Palencia con el Baskonia en una jornada 31 de la Liga Endesa para los locales, que debían recibir a un conjunto de Euroliga y seguir dejando que las matemáticas fueran el único rescoldo al que el equipo morado pudiera agarrarse. Nadie dijo que fuera fácil, pero ¿acaso algún partido esta temporada lo ha sido?

Ya los prolegómenos del encuentro indicaban un ambiente de final con los aficionados morados llegando en procesión desde la campa de la Feria Churra, donde se ubicó la Fan Zone para este partido. No ayudaron las bajas temperaturas en un día feo y lluvioso de abril. Pese a las inclemencias meteorológicas, nuevo lleno en la Caldera de Castilla para recibir a un Baskonia que venía de perder en la competición continental con el Real Madrid.

La oveja churra estuvo presente también en el inicio del encuentro con la entrega de una reproducción de esta especie característica de la zona a los dos dirigentes de los dos equipos. Incluso el himno de Palencia fue interpretado por la Camerata Vocal Bella Desconocida para darle incluso un mayor empaque de partido grande.

Salió el Zunder Palencia con Hands, Ortega, Van der Vuurst, Kamba y Pasecnkis quien, como es habitual, ganó el saque inicial para los locales y anotó los dos primeros puntos para el equipo colegial, seguido de un triple de Kamba y otra canasta de Van der Vuurst, que insuflaba ánimos al Pabellón de los Deportes, profundamente ruidoso desde el inicio con este parcial de 7-0 hasta el tiempo muerto de Baskonia.

El tremendo mate de Kamba dejó casi sorda a la Caldera de Castilla, que siguió acompañando al Zunder hasta ponerse 10 arriba, 14-4, durante los tres primeros minutos de juego. Un comienzo arrollador que pilló totalmente desprevenida a la defensa vasca.

Sedekersikis redujo distancia con un importante triple, sumado a la canasta de Raiste, colocaba un 15-12 en el luminoso que obligaba a reaccionar a la afición, muy preocupada, como es lógico, después de la agónica victoria de Lugo frente a Granada y que, sí o sí, obligaba a ganar al Zunder para sobrevivir una semana más al descenso matemático.

Pasecnicks se alió bajo la pintura con Van der Vuurst, los mejores del encuentro para para dejar un 19-12 con la mitad del primer cuarto jugado. Momento que Guil aprovechó para mover el banquillo: salía Chumi y entraba Benite.

Así, al tran tran, Baskonia se sujetó al partido con varios triples de Howard, mientras la afición morada gritaba al unísono el ¡Kamba quédate!, cuando el jugador fue retirado del partido por Haarms. Por lo demás, intercambio de ataques entre ambos conjuntos mientras se iban consumiendo los minutos de un muy intenso primer cuarto que, finalmente, se quedó con el resultado de 32-27, tras un último zarpazo de Benite desde la línea de tres puntos.

SEGUNDO CUARTO

La falta recibida y los tiros libres marcados por Howard al inicio del segundo cuarto no gustaron al respetable, que se volvió a encomendar a Pasecniks y al triplazo de Benite más asistencia de Frankamp, que obligó a Ivanovic solicitar tiempo muerto con el 39-32 en el marcador. Despegaba el vuelo con otra bandeja de Frankamp para acercarse a la distancia de más 10 el Zunder, resultado que logró con otra nueva canasta de Pasecnicks, 45-35.

La clásica técnica a Guil le llegó bastante antes del inicio del tercer cuarto tras una supuesta pérdida de Frankamp, que otorgó tiros libres a Howard, imperial con su particular show anotador durante todo el encuentro. Broncas a los árbitros aparte, el Zunder, sabedor de que esta podría ser su noche, desató un vendaval que llevó hasta 17 puntos arriba, 57-40, que pudieron ser más si Benite hubiese anotado un último triple antes de una pérdida de Howard, que poco después anotaría su propio lanzamiento de tres para anotar 23 puntos en su casillero particular.

Un Baskonia muy acertado, tanto en el rebote ofensivo como defensivo, obligó a Guil a pedir tiempo muerto con 57-48, que mostraba la reacción del conjunto vasco para llegar así al medio tiempo tras jugarse el triple sin fortuna Hands.

TERCER CUARTO

El juego se reinició con un desmayo en al grada, presagio de que este partido todavía tenía mucho que ofrecer. Aunque, mirando solo el marcador, diera la sensación de que no saber qué equipo fuese el que juega Euroliga. Pascenicks comenzó con dos puntos y un rebote para enderezar a su equipo con un importante margen de 11 puntos arriba frente a un Baskonia que se mantenía a flote gracias al tridente Howard-Costello-Sedekerskis.

Los fallos en los tiros fueron poco a poco perjudicando al Zunder Palencia, que veía cómo se le escapaba su ventaja cuando con un mate se sumaba a la fiesta del Baskonia Marinkovic. El challenge pedido por el técnico morado no pudo evitar la antideportiva a Pasecniks, que obligó a Guil a recomponer el esquema con un resultado de 64-59.

Baskonia cambió a defensa en zona para evitar posibles penetraciones como la de Pineiro quien, sumando a un contrataque perfectamente ejecutado de Frankamp, daba aire al conjunto colegial, 68-62. No cesaron las protestas del público palentino contra los árbitros, que siempre fallaron para el lado visitante de la cancha. Los tiros libres acercaron peligrosamente al Baskonia, con tan solo un punto de distancia entre los dos conjuntos, hasta que Howard puso por primera vez a los vascos en todo el partido. Se le hizo muy largo el tercer cuarto al Zunder Palencia, que se fue al descanso tres puntos abajo, 70-73, desperdiciando una ventaja de 11 puntos. Casi sobre la bocina, Costello clavó un triplazo que volvió a ampliar distancias tras los tiros libres de Frankamp, 72-76 y todo por decidir en el último cuarto.

ÚLTIMO CUARTO

La expulsión del técnico morado, Luis Guil y los duros insultos desde la grada al trío árbitro marcaron el inicio de un último cuarto con ventaja momentánea para el Baskonia tras las anotaciones desde el tiro libre de 72-78.

Balones a Pasecniks como único recurso local mientras Howard se iba a los 30 puntos y Sedekerskis le seguía con 21. El cambio de Ortega por Kamba no fue suficiente para que el Zunder se reenganchara al partido, siempre por debajo en el resultado en este último cuarto. Con casi la mitad del tiempo jugado, una nueva antideportiva a Benite durante un contragolpe de Miller provocaba gritos de ¡manos arriba, esto es un atraco! desde las gradas del Pabellón, mientras la distancia en el marcador seguía aumentando para Baskonia hasta alcanzar el 79-90. Los vascos lograban levantar un resultado idéntico al del anterior cuarto.

El sueño de la ACB pendía de un hilo para el conjunto local después de un nuevo hachazo en forma de triple por parte de Marinkovic. Los tiros libres del Zunder Palencia mitigaron un tremendo correctivo a falta de tres minutos para un final que presagiaba lo peor para los morados. Tuvo que ser reconfortante para el técnico morado, Luis Guil, ver desde el túnel de vestuarios cómo la grada seguía coreando el ¡Sí Se Puede! cuando el luminoso marcaba 88-93. Howard volvió a apagar el fuego rival con un tremendo triplazo que le dejaba al filo de los 40 puntos, impresionante su partido. Una nueva canasta de Marinkovic pareció definitiva a menos de un minuto para el pitido final, 91-96 y casi todo dicho.

Caras largas entre los aficionados, que decían adiós a la Liga ACB, con una imposibilidad matemática de mantener la categoría a falta de tres partidos para terminar la temporada. El ensordecedor pitido de la grada a los árbitros precedió a un tremendo aplauso con el resultado final de 94-101.

 

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