El presidente del Consejo de Cuentas aclara que la Junta incurrió en un “mal sistema de identificación de gastos” vinculados a la pandemia
ICAL
El Grupo Parlamentario Socialista defendió hoy que el Gobierno central fue la Administración que asumió el gasto COVID en Castilla y León, frente a la Junta, “que no destinó ni un euro de los impuestos propios de los castellanos y leoneses” y, además, la acusó de “hacer caja” gracias a los fondos COVID. Así lo aseguró la portavoz del PSOE en la Comisión de Hacienda de las Cortes, Rosa Rubio, quien se encontró con la respuesta de su homóloga del Grupo Popular, Leticia Sánchez, quien señaló que “eso no es cierto” y que la cifra, de hecho, “fue claramente insuficiente”.
Rubio defendió la “intervención ejemplar” del Gobierno central durante la pandemia, algo que “avala” el informe presentado hoy por el presidente del Consejo de Cuentas, Mario Amilivia, quien dio a conocer el documento ‘Análisis económico financiero del impacto de la COVID-19 en Castilla y León, específicamente las entidades del sector público de la Comunidad sujetas al régimen de contabilidad pública’, un documento “frío”, según el propio Amilivia, porque “se refiere al año más convulso, al menos de nuestras vidas, de los que estamos aquí”.
“Hoy se ha demostrado que Castilla y León tuvo cubiertas con excedentes gracias al Gobierno”, presumió Rubio, quien insistió en que “todos los ingresos percibidos por la Junta procedieron del Gobierno; ni un euro pagó la Junta”. “Dirán la derecha y la ultraderecha que era su responsabilidad, pero allá por 2011 también lo era de Rajoy no dejar caer al eslabón más débil de la cadena. Se quedarán mudos desde la derecha y ultraderecha”, expuso.
También recordó que el Gobierno inyectó más de 1.500 millones de euros a la Junta, que “no arrimó el hombro y solo se dedicó a distribuir y gestionar”. Igualmente, tachó al Ejecutivo autonómico de “falta de transparencia”, algo que queda avalado en que el Consejo de Cuentas “no ha podido identificar los orígenes por la opacidad y tuvo capacidad limitada”.
Fondo Covid
Rubio cuestionó que la Junta pusiera sobre la mesa 400 millones de euros para el fondo COVID, como aseguró la portavoz ‘popular’, y preguntó a Amilivia que le precisara “en qué página del informe está eso”. “Me leo todos sus documentos, de la primera a la última página. Y no lo he encontrado. Quizás me lo he pasado. Me gustaría que me lo aclarara”, preguntó. Amilivia respondió que el dinero “es de todos los españoles” y aconsejó que lo relevante del informe es que la Junta no distingue entre gastos COVID y no COVID y que ello causa “confusión” porque “da la sensación de que hay dinero de más” por la falta de certificaciones. “Si no sabemos el gasto asociado a la pandemia no podemos determinar qué es gasto coyuntural o estructural y corremos el riesgo, en un futuro, de confundirlos”, argumentó el presidente del Consejo.
Por último, Rubio acusó del “yo invito y tú pagas” a la Junta, con ayudas para contratación de personal en grandes municipios, que “vendieron como suyo”. También afeó el aumento de gasto en alta dirección en 2019 y medio millón de euros en campañas de Presidencia de la Junta. “Ayudar no, pero propaganda para decir que ayudo, si. Es imperdonable e inadmisible. Cuando los calificamos de falaces, demagogos y de no tener vergüenza, se enfadan”, explicó, para asegurar que comparte todas las recomendaciones del Consejo de Cuentas.
Argumento “falso”
Por su parte, Leticia García Sánchez (PP) calificó de “falso” lo apuntado por la procuradora socialista y reflexionó que las administraciones públicas “se enfrentaron a una situación desconocida”, en la que las comunidades autónomas “fueron despojadas de sus competencias por que el Gobierno se erigió en mando único”. También precisó que el primer material sanitario “no lo trajo el Gobierno, sino la Junta”, a lo que Rosa Rubio contestó que es cierto, “pero pagado” por Moncloa.
Sánchez defendió que los indicadores “han mejorado en todo”, si bien apeló a la prudencia por su “modulación a la pandemia”. A su juicio, el informe “pone en evidencia la prioridad en inversiones en servicios públicos”. “No es correcto que el Gobierno pagará todo, sino parte de ello; y estuvieron bien empleados. Aún así, esos fondos eran insuficientes, como dijo entonces la Junta y aclara el informe. El sobrecoste de sanidad o educación lo cubrió la Junta, porque el fondo fue insuficiente”, sentenció.
Por último, recordó que en 2020 “la ayuda llegó de Bruselas, canalizado por el Gobierno, pero mal repartido”. Aprovechó para reclamar un nuevo sistema de financiación y presumió que “a pesar de las dificultades, los servicios públicos se mantienen como los mejores de España”.
Por su parte, Pablo Fernández, de Unidas Podemos, llamó la atención de que la deuda por habitante “se incremente” e instó a “corregir la dependencia mostrada de pasivos financieros ajenos demostrada por la Comunidad”. También abogó por hacer caso al Consejo de Cuentas para crear un “sistema específicos de financiación para evitar depender de ellos”. Igualmente, agradeció a Amilivia que admita que las fuentes de financiación del Estado “han superado los mil millones de euros”. “Explíqueselo a la portavoz del PP”, invitó Fernández.
José Ramón García (UPL-Soria Ya) alabó la labor económica “tan relevante” del Consejo de Cuentas, “con un informe tan exhaustivo”, e instó a elaborarlo en una próxima ocasión por provincias, algo que el presidente del Consejo de Cuentas se comprometió a estudiar a pesar de la dificultad. También preguntó la razón de que no se recojan las cuentas de las cuatro universidades públicas, a lo que Amilivia le respondió que no se incluyen porque son un anexo a la Cuenta General y se presentan por separado. Así, pronto se aprobará el de la Universidad de Burgos (UBU) y se encuentra pendiente de presentar en las Cortes el informe económico-financiero de la Universidad de León (ULE).
“Uno o dos casos”
Por último, el portavoz de Vox, Francisco Javier Carrera, se retrotrajo al inicio de la pandemia para ironizar sobre que en España “habría uno o dos casos” de COVID. En su contexto mencionó algunas de las críticas insistentes de su formación al Gobierno central e hizo énfasis en que el incremento de la deuda por habitante “afectará en un futuro a la hora de adquirir deuda”.
En este punto, reflexionó que “solo aplicando rigurosos controles de gasto y de los recursos públicos se podrá estar preparados para el futuro”. Apeló a “no reparar en cuestiones ideológicas” y finalizó: “La deuda de hoy son los impuestos de mañana”.