Antonio Silván exige que los servicios ‘low cost’ de AVE lleguen también hasta la provincia leonesa vía Palencia y Valladolid, así como la implantación de un segundo operador en el eje Madrid-Asturias
El candidato del Partido Popular al Senado por León, Antonio Silván, denunció hoy que el Gobierno de España “margina” a las provincias de León, Burgos, Palencia y Valladolid con su planificación ferroviaria en “una discriminación por cuestiones ideológicas y de desprecio hacia ciertos territorios”.
El ‘popular’ detalló que el nuevo ataque del Gobierno llega tras las declaraciones de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, “al anunciar que solo Zamora se beneficiará del AVE de bajo coste y porque va de paso hacia Galicia”. Frente a ello, exigió que estos servicios se pongan también en León porque “los leoneses son de los españoles que más dinero pagan por un billete de tren”, con precios de 60 o 70 euros hasta Madrid frente a los siete desde Barcelona.
De igual manera, Antonio Silván puso de relieve que los trenes prometidos para llevar a cabo los servicios ‘low cost’ “ni tan siquiera están en servicio aún”, aunque “la falta de vehículos existente en la actualidad no se paliará con los encargados”, tal y como afirmó que denuncian los ferroviarios que “ven cómo Renfe en León ha perdido su centralidad como eje ferroviario del noroeste de España”.
Por este motivo, las palabras de la ministra para Zamora de “mejores trenes, más plazas, más frecuencias y mejores tiempos de viaje”, no se cumplirá para León, donde “faltan precisamente plazas y frecuencias”, mientras que el presidente de Renfe, Raül Blanco, “elude responder cuándo se extendería ese servicio de bajo coste”, lo que demuestra que “ni saben ni contestan porque la realidad es que no hay nada previsto para León”.
El candidato al Senado también denunció la “marginación de León con la implantación de un segundo operador ferroviario en el eje Madrid-Asturias”, como Iryo o Ouigo, así como el retraso en la duplicación de vía entre Palencia y León “que aún tiene vía única”, lo que “penaliza aumentar los surcos ferroviarios para los operadores” y genera “un embudo que llevan años prometiendo resolver y no lo han hecho”.