Transición Ecológica corrige el destino que se iba a dar a los escombros de la construcción de una depuradora reversible en Velilla del Río Carrión
La Mina San Luis de Guardo no se rellenará de residuos de la construcción de uno de los proyectos más singulares que se van a ejecutar en la Montaña Palentina: una depuradora de aguas ácidas procedentes de dos minas próximas (actualmente cerradas) y que a la par generará electricidad con el bombeo o turbinado de ese agua a modo de pila de energía.
En la Declaración de Impacto Ambiental de la Central Depuradora Reversible de Velilla publicada en diciembre de 2022, se consideraba “como ubicación ambientalmente más idónea los huecos de la mina San Luis” para el depósito de los residuos inertes. Una ubicación propuesta por la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Junta de Castilla y León, frente a la planificada por el promotor de esta depuradora reversible, que había planificado el depósito de los residuos de la construcción en dos escombreras “para un volumen de depósito de 4.500.000 m3 y una superficie de 28 ha entre ambas” en “terrenos próximos ya alterados por labores mineras”.
En aquella Declaración de Impacto Ambiental, se explicaba que “el hueco de la antigua mina de San Luis, con una superficie de 35,4 ha, sería susceptible de albergar la totalidad del material sobrante del proyecto, sin necesidad de emplear dos escombreras”. “Sólo en el caso de que el hueco de la mina de San Luis no fuera susceptible de albergar la totalidad de los residuos, estaría justificada la apertura de alguna de las escombreras proyectadas en el EsIA”, determinaba la DIA.
Rectificación
Y eso es lo que ha pasado, un año después. Pero no por motivos medioambientales sino por motivos turísticos. Porque en la zona de la Mina San Luis, “el Ayuntamiento de Guardo está desarrollando un proyecto de Parque de Aventura y no autoriza la implantación de la escombrera, ya que sería incompatible con el mismo. Esta cuestión no fue puesta de manifiesto durante la tramitación del procedimiento de evaluación de impacto ambiental del proyecto” se puede ver ahora en la modificación de esa Declaración de Impacto Ambiental.
En base a esta esta circunstancia, el promotor pone de manifiesto que el cumplimiento de la condición 1.2.2 de la resolución es inviable y solicita su modificación, de modo que la condición prevea que: «con el objeto de desarrollar las escombreras superior e inferior en las ubicaciones inicialmente proyectadas y depositar allí los excedentes de excavación que, una vez caracterizados y clasificados como residuos de construcción y demolición (RCD), no sean utilizados en rellenos y restauraciones de la propia obra».
Ante esto, la Dirección General de Infraestructuras y Sostenibilidad Ambiental de la Junta de Castilla y León indica que “los residuos inertes de las excavaciones del proyecto se habían ubicado acertadamente, de acuerdo con la DIA, en áreas degradadas de la cercana Mina San Luis, pero ante la imposibilidad manifestada por el Ayuntamiento, el nuevo escenario supone un cambio importante que podría causar nuevos impactos ambientales no previstos”.
Proyecto Turístico
Algo que ratifica el Servicio Territorial de Medio Ambiente en Palencia que informa “que los terrenos pertenecientes a la mina San Luis no están disponibles para el traslado de los residuos de excavación del proyecto de central depuradora reversible, dado que cuentan con derechos mineros vigentes, en la línea de lo manifestado por el Ayuntamiento de Guardo en relación con el futuro proyecto turístico «Valle del Sextil»”.
Es por ello que, ahora sí, la Declaración de Impacto Ambiental del Proyecto contempla “el uso de las escombreras superior o inferior propuestas en el Estudio de Impacto Ambiental”. Escombreras que, en todo caso tras su relleno, se restaurarán y se procederá a su integración paisajística, con el extendido y compactado de tierra vegetal y revegetación. Las escombreras quedan marcadas en esta imagen realizada por la promotora, CDR TREMOR.
El Proyecto.
El proyecto consiste en la construcción de una central hidroeléctrica reversible con función depuradora en las inmediaciones de Velilla del Río Carrión. El agua que se usará para el funcionamiento de la central se sacará que emana de las bocaminas de Valdelabárcena y Majadillas. Dos yacimientos mineros abandonados, que vierten sus aguas con un PH muy ácido a dos arroyos que drenan en el Carrión arrastrando consigo metales pesados.
Dos tubería de 813 m y 1.968 m de longitud llevarán esa aguas a un depósito regulador de 6.000 m3 de capacidad, y “de ahí a unas instalaciones de pretratamiento constituidas por una cámara de mezcla, vertedero de aireación, de entre 20 y 30 m3 de capacidad, y decantador de 90 m3, donde se plantea reducir la mayor parte de la carga contaminante”, recoge la DIA.
Una vez tratado el agua, se pasará al depósito inferior del complejo, que será excavado en el terreno con una capacidad ligeramente superior al hectómetro, una superficie de lámina de agua de 7,39 ha y generado a una cota de 1.161 metros sobre el nivel del mar.
El depósito superior también será excavado en el terreno, de igual capacidad y superficie y una cota de coronación de 1.524 msnm (más de 360 metros por encima).
Estos depósitos estarán unidos por una tubería de 4 metros de diámetro, y 1.968 metros. Conectada a la tubería, y en caverna excavada de 680 metros cuadrados, la central hidroeléctrica con dos turbinas reversibles de 71,91 MW cada una.
La energía
Tal y como explica la Declaración de Impacto Ambiental, la energía generada se obtendrá “a partir de un caudal total de turbinado de 47,00 m3/s y un caudal de bombeo de 34,12 m3/s de agua entre los dos depósitos, con un salto bruto medio de 362 m. La central está diseñada con una potencia de turbinación de 143,81 MW y con una potencia de bombeo de 144,40 MW, siendo la máxima energía neta diariamente almacenada en el depósito superior equivalente a 839 MWh. La producción teórica máxima anual de la CDR es de 306,235 MWh, aunque la producción anual se estima en 204,156 MWh”.
De esta manera, el agua irá de arriba a abajo generando electricidad en los momentos de necesidad energética y volverá hacia el depósito superior bombeado cuando la necesidad energética sea menor.
En cuanto a la evacuación de la energía producida en la CDR, se realizará mediante un tramo subterráneo de línea eléctrica a 132 kV de 194 m de longitud, hasta la Subestación (SE) CDR Carrión de nueva construcción, desde donde partirá otra línea subterránea a 132 kV de 294 m de longitud hasta la SET Carrión Renovables 132/400 kV. Desde esta subestación se conectará con la SET Velilla 400 kV de REE a través de una línea área de evacuación a 400 kV y 400 m de longitud.
La fecha de inicio en operaciones será diciembre de 2026, según la promotora, que subraya que el CDR VELILLA representa, entre otros, singularidades y beneficios desde el punto de vista energético y medioambiental. “Permite la introducción de más energías renovables en el sistema eléctrico contribuyendo a su adecuada gestión y adicionalmente, CDR VELILLA aporta los beneficios ambientales asociados que genera al depurar aguas contaminadas”
