Miriam Badiola / ICAL
El Gobierno de España invertirá más de 1.200 millones de euros en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia “apoyar los regadíos sostenibles con alta ambición ambiental y digital”, lo que también irá acompañado de reformas legislativas. Así lo anunció hoy en León la directora general de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Isabel Bombal Diaz, quien aseguró que se trata de “la mayor inversión hecha en muchas décadas en el país”.
Bombal explicó que esta cuantía económica, que concretará el viernes el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, pretende que se pueda seguir teniendo “un sector agroalimentario líder en producción y sostenible en las vertientes económica, social y ambiental”, para lo que los regadíos son “un instrumento indispensable” que también contribuye a tener “una actividad agraria atractiva y en la que cada vez haya más jóvenes, mujeres y vida” y que ofrezca a los consumidores “productos asequibles durante todas las épocas del año” y “un conjunto de variedad de alimentos”.
Estas declaraciones de la directora general de Desarrollo Rural tuvieron lugar en el transcurso de la inauguración del XV Congreso Nacional de Comunidades de Regantes que se celebra durante esta semana en León con la participación de más de 800 expertos, empresas y regantes para reflexionar sobre “algo tan importante como el regadío”, así como administraciones, entre las que se encuentran los presidentes de las nueve Confederaciones Hidrográficas junto con sus equipos técnicos.
En ella también intervino el director general del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teodoro Estrela Monreal, apostó por la capacidad del evento para “poder avanzar hacia un regadío más sostenible, eficiente y respetuoso con el medio ambiente”. Para ello, una de las cuestiones importantes es la digitalización del sector en aras de conseguir “una mayor eficiencia en el uso del agua”.
Una digitalización que, según aseguró, “también se apoya desde la administración”, de manera que, gracias a los fondos Next Generation se financiarán “una serie de actividades dentro del Perte del ciclo del agua” que está dirigido a todos sus usos, “el ciclo urbano del agua, el industrial y el regadío”.
En representación de la Junta de Castilla y León, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, puso de relieve que hablar de regadío es hacerlo de “la competitividad de la agricultura, la producción agrícola y de alimentar a la ciudadanía” en un momento que es “el mejor” tras la crisis provocada por la pandemia y la de la guerra de Ucrania que “introduce dificultades en la soberanía alimentaria del mundo”.
Para Suárez-Quiñones, modernizar y transformar regadíos y dar competitividad al campo es “referirse a unos beneficios socioeconómicos indudables”, ya que “donde hay regadío hay vida” al permitir “la incorporación de mujeres y jóvenes y un relevo intergeneracional”, así como la producción.