La empresa “garantiza” la reubicación de los 172 empleados de la plantilla propia en sus otros establecimientos
ICAL
El Corte Inglés ha formalizado la venta de los grandes almacenes de la céntrica calle Constitución. Después de varios meses de negociaciones con una empresa inmobiliaria local –Conjunto Residencial Las Eras–, ambas partes han llegado a un acuerdo, que ya ha sido firmado, según publica en su edición de hoy El Norte de Castilla. El centro comercial permanecerá abierto durante la campaña de Navidad y el periodo de las rebajas de enero, para echar el cierre definitivo en la primavera de 2023, según apunta la empresa que dirige Marta Álvarez, la heredera de este negocio de distribución, precisa el rotativo.
El futuro destino del edificio aún se está planificando, aunque el comprador ya tiene en mente darle un uso mixto, que pasaría por reservar las primeras plantas para algunas marcas comerciales potentes y dedicar el resto a apartamentos turísticos e incluso a hostelería aprovechando la cubierta como terraza. Su calificación en el PGOU es de suelo terciario.
Desde El Corte Inglés subrayaron ayer que “la empresa preservara el empleo de la actual plantilla propia del centro de Constitución, que será distribuida entre el resto de establecimientos que la compañía mantiene abiertos en Valladolid”. En este momento, cuenta con 172 empleados en nómina en este espacio y otros 53 que trabajan en explotaciones ajenas a la marca: espacios que se alquilan a diferentes firmas de moda o de otro tipo de productos.
Así, los trabajadores propios de El Corte Inglés serán reubicados entre los centros del paseo de Zorrilla, Hipercor y Outlet Monasterio, el Sfera de la calle Santiago y el supermercado Supercor, de Puente Colgante. La empresa destaca que, igualmente, tratará de que se puedan conservar también esos puestos que ahora desempeñan los que atienden los espacios alquilados, precisa el rotativo.