El festival internacional de cortometrajes de Aguilar de Campoo, orienta su futuro hacia el fomento de la industria audiovisual autonómica y el establecimiento de lazos internacionales que fomenten la coproducción
Aida Acitores | Palencia
“Siempre que vengo aquí, cada año, explico que el festival se está reinventando”. El director del Aguilar Film Festival, Jorge Sanz, advierte así la propia idiosincrasia del ciclo cultural más importante del calendario palentino y el segundo de la región, solo por detrás de la Seminci.
La innovación en esta trigésimo tercera edición es múltiple. Supone el tan celebrado regreso a la presencialidad, como destaca la diputada del área de Cultura, Carolina Valbuena. Pero además, se nutre de “la única cosa buena que nos dejó la edición online que tuvimos que hacer el pasado año debido a la pandemia”, que fue el aprendizaje en torno a los nuevos espacios virtuales de relación con el público.
Y, por último, la principal reinvención es toda una declaración de intenciones a futuro: la apuesta por la industria cinematográfica en Castilla y León, que es probablemente uno de los ámbitos culturales menos desarrollados en la actualidad.
Este año, destaca la firme apuesta por la producción audiovisual en Castilla y León, de la que Jorge Sanz habla con claro entusiasmo. “Hemos recibido más de 80 cortometrajes hechos en la comunidad, una barbaridad con respecto a otros años. Pero no solo se trata del número. Cada vez que veíamos un corto, lo incluíamos. Montábamos otra sesión, y otra…”. Y así, en el próximo Aguilar Film Festival se han programado hasta cinco sesiones dedicadas al audiovisual castellano y leonés, a las que se suma un corto en la sección De Campo y cuatro más en la Sección Oficial.
Ante ello, “decidimos que el festival debía celebrar ese subidón de cantidad y calidad, y sobre todo de talento, que estábamos encontrando. Y eso nos llevó a otra idea: poner el festival al servicio de los cineastas de Castilla y León”.
Así pues, la 33ª edición dedica por primera vez una parte de su programación a la industria para dar “un impulso muy potente a la parte profesional”, a través de actividades de formación, foros de encuentro y networking como el Aguilar FF Industry Hall e incluso una sala de proyección privada para profesionales.
La organización del Aguilar Film Festival ha llegado a un acuerdo con la Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid (ECAM) para “impulsar proyectos en desarrollo”, con un premio que permitirá que dos ideas se produzcan en las instalaciones del centro madrileño y con su apoyo material y profesional.
Y es que el AFF ya está plenamente consolidado como festival de cine a nivel estatal y supone una apuesta firme para las instituciones. Así lo demuestran apuestas como la de Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales (ICAA), que ha aumentado su ayuda al certamen hasta los 20.000 euros, o de instituciones de la zona como la Junta (que triplica su apoyo hasta los 15.000 euros) o la Diputación de Palencia, que concede 27.000 euros.
Así que, además de la tradicional apuesta por la exhibición de la mejor selección internacional de cortometrajes, “la apuesta actual es la de ser el festival de Castilla y León que dedica más contenido a los cineastas de la tierra”, no solo en cuanto a proyección de trabajos sino, sobre todo, con respecto al “impulso y fortalecimiento del sector”.
Además, los cortometrajes de la sección castellano y leonesa podrán verse la semana posterior al festival presencial a través de la plataforma Filmin. “Es una oportunidad que el sello de nuestro festival avale esos trabajos”, insiste Sanz.
Un sector, además, que este año es más “joven” de lo normal, en todas las secciones. Es la segunda característica de la programación de esta edición: hay muchísimos trabajos de gente joven, y esa la manera de superar el pasado año con esa energía que tienen sus películas”.
LAZOS INTERNACIONALES
Y, continuando con las reinvenciones, en la presentación de esta mañana el director del Aguilar Film Festival dejó caer la que será la innovación principal de la edición 2022: la coproducción internacional. Las bases se asientan ahora con iniciativas como la colaboración con el festival colombiano Bogoshorts, en Bogotá. “Vamos a empezar una alianza y el año que viene intentaremos una forma de coproducción, que iniciamos este año con una charla online que se produce a la vez en el Bogoshorts y el Aguilar Film Festival”, con representantes de los institutos cinematográficos de Colombia y España en torno a esos mecanismos de creación conjunta de proyectos audiovisuales, a ambos lados del Atlántico.
UNA ESTRUCTURA PÚBLICO-PRIVADA
En la presentación de esta mañana, la alcaldesa de Aguilar de Campoo, María José Ortega, destacó el vínculo que une al municipio palentino con la cultura “en mayúsculas”, durante “los 365 días del año pero especialmente en este puente de diciembre”. Un vínculo que se sustenta en la colaboración público privada entre las diversas instituciones y empresas como Gullón, Renault o Aquona, todas ellas representadas en el acto de hoy. “No han fallado ningún año y han ido continuamente haciéndonos sentir más seguros”, agregó Ortega.
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