Con un coste estimado de 115 millones de euros, la CHD vuelve a sacar el anteproyecto a Información Pública para incorporar dos estudios solicitados por la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental
Como Sísifo, el proyecto de regulación extra de la cuenca del Carrión no deja de subir piedras a lo alto de la montaña, para que estas se caigan y tenga que volver a elevarlas. Hace décadas que se viene hablando de que las reservas hídricas del Sistema Carrión son deficitarias para abastecer a 354.529 habitantes (de los cuales 341.155 hab. con suministro mediante la regulación de las aguas superficiales) y una superficie regable de 58.300 ha. (49.300 has regadas con aguas superficiales y otras 9.000 has regadas con aguas subterráneas), además de garantizar el mantenimiento del régimen de caudales ecológicos.
De hecho, se han realizado trasvases desde embalses leoneses para dar de beber a ciudades y campos que se nutren del agua del sistema Carrión.
Pero esos trasvases tienen los días contados, al menos tal y como se conocen. “El vigente Plan Hidrológico 2022-27 prevé que, con las medidas propuestas en este, se logre una reducción desde los 80 hm3 de media en la situación actual a unos 43 hm3 para el año 2027 y 29 hm3 para 2033”. Por tanto, el Carrión debe apañárselas solo.
Soluciones
Para lograr tener más agua que los 165 hectómetros que pueden acumular Compuerto y Camporredondo, se llegó a plantear un nuevo embalse en la Montaña Palentina, el de Vidrieros, en la pleno paraíso montañés, con dos variantes, una pequeña y otra grande. Fue desechada. También se pensó en recrecer las presas de Camporredondo y Compuerto, pero la ganancia tampoco era tan grande. Igualmente se planteó una gran balsa con casi tanta capacidad como Compuerto (95 hm3), en Plena tierra de Campos, junto a Fuentes de Nava, al estilo de otra que se ha construido en Valladolid, pero inmensamente más grande.
Y finalmente, se pensó en aprovechar los vallecitos que forman los arroyos de las Cuezas para crear primero tres y luego dos embalses con una capacidad, restada los embalses muertos, de 55 hectómetros, cerca de igualar al de Requejada (65). Proyectos, adendas, modificaciones… Piedras para arriba, piedras para abajo. E iban pasando los años sin que el proyecto llegara a buen fin para desesperación de los regantes.
Segundo proceso de Información Pública
Finalmente, la solución elegida, el proyecto de las dos balsas de la Cueza, con una tubería de llevada de agua del Carrión desde Acera de la Vega, para derivar el agua excedentario del Carrión en invierno a estos almacenes laterales y para usar la tubería como aprovisionamiento de agua a presión para los regadíos de la Vega de Saldaña y Carrión, fue sometida a información pública en el año 2021. Momento en el que, según la CHD se registraron “256 escritos (entre alegaciones comunes y respuestas a Administraciones y personas consultadas)”.
Sin embargo, aquel proceso de Información Pública fue declarado nulo, porque, como también explica la Confederación Hidrográfica del Duero en la justificación de este nuevo proceso, “la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental, (órgano ambiental encargado de la Evaluación de Impacto Ambiental) comunicó que no constaba en el estudio de impacto ambiental presentado, el apartado específico que incluya la identificación, descripción, análisis y cuantificación de los efectos esperados derivados de la vulnerabilidad del proyecto ante riesgos de accidentes graves o de catástrofes”.
Es por ello que en este segundo lanzamiento de la Información Pública del anteproyecto sí se incorpora, en la documentación ambiental, los estudios específicos reclamados por el órgano ambiental, que fueron elaborados con posterioridad al trámite de la anterior Información Pública del año 2021 y que, a su juicio, deben estar también presentes en la documentación expuesta en la Información Pública”.
La falta de esos estudios, que ha sido realizada ahora por técnicos de la propia Confederación, con el apoyo de una consultora, es lo que ha retrasado varios años la puesta en marcha de un proyecto, que está valorado en hasta 115 millones de euros, según se desprende de la documentación pública.
Al tratarse de una nueva Información Pública, los afectados o interesados podrán ejercer su derecho a presentar sugerencias y alegaciones en el plazo de 30 días. La documentación puede consultarse en el siguiente enlace.