Las esculturas de El Abrazo y del pináculo de la catedral de León de la Plaza de León de Palencia serán reubicadas tras remodelación de la plaza de Correos, que incorporará un nuevo elemento ornamental
O. H.
Muchas cosas van a desaparecer con la remodelación de la segunda fase de Jardinillos y su entronque con la calle Mayor, incluso tras la modificación del proyecto para poder ajustarse mejor a las cuantías económicas. Van a desaparecer, en varias zonas, la separación entre vehículos y peatones; van a desaparecer 35 plazas de aparcamiento en Simón Nieto, y también la actual configuración de la glorieta principal de la plaza de San Pablo. Esta se desplazará hacia el paso subterráneo y se hará más redonda. Pero como se pretende una visión directa desde el parque de Jardinillos hacia la Calle Mayor sea directa, sin impedimentos visuales, la escultura de El Abrazo no tendrá cabida en la futura glorieta.
Tampoco tendrá su actual asiento en una de las dos isletas existentes complementarias a la glorieta, en concreto la que se ubica ante la puerta de Correos, el pináculo de la catedral de León regalado por la vecina ciudad en agradecimiento a Palencia por dejarle usar su vertedero durante un tiempo.
Por ello, para ambos elementos ornamentales, el proyecto les ha dado una nueva ubicación. Y en ambos casos, en acceso directo de los ciudadanos que, a diferencia de lo que ocurría hasta ahora, además de verlas podrán tocarlas.
El Abrazo
Por un lado, la escultura de El Abrazo, obra de Feliciano Álvarez, se colocará muy cerca del grupo forestal que formarán, en la esquina de la plaza de León con Eduardo Dato (frente a la farmacia), las tres palmeras y los cuatro cerezos-ciruelos que se trasplantarán desde las glorietas y las isletas que se van a eliminar.
Puesto que la acera a la altura de la Farmacia se va a acercar mucho hacia Correos, comiendo parte de la isleta de césped existente, quedará bastante sitio para la colocación de estos dos tipos de elementos: los árboles y la escultura.
Explica el proyecto que “será colocada sobre una nueva peana de hormigón blanco encofrado in situ. Esto servirá para realzarla, elevarla a una altura de seguridad y darle más protagonismo del actual”.
El Pináculo
A la reproducción del pináculo de la catedral de León lo colocarán en el triángulo que formará la conexión entre las calles Eduardo Dato y Antonio Maura, puesto que la acera/parte reservada para los peatones frente a los carriles para vehículos, se alargará bastante hacia el edificio de Correos. Para hacerse una idea, el pináculo se colocará en la actual isleta pintada donde día sí y día también se pueden ver vehículos mal aparcados.
Podrá colocarse ahí, en una zona reservada para los peatones, porque, según el proyecto desaparecerá la conexión directa entre ambas calles a la altura de Armarios Palencia.
La parada de autobuses en la esquina de Antonio Maura y la Calle Mayor también se reestructurará en la línea del proyecto de accesibilidad de paradas de autobús. Se retrasa ligeramente su ubicación. Este cambio de ubicación se explica por el deseo de despejar una zona dedicada al peatón, para liberar el espacio actualmente ocupado por la parada y para ordenar la actividad del tráfico en este punto de convergencia.
Nuevo elemento.
En ese espacio se ubicará un nuevo elemento ornamental. Está denominado como Monumento Palencia y tendrá unas dimensiones de 1,80 metros de ancho, 0,40 metros de fondo y 2,20 de altura. El proyecto explica que “se trata de un monolito construido en granito gris Duero de grano fino y hormigón prefabricado. Los mismos materiales con los que se construirá todo el proyecto. Servirá como barrera al tráfico de vehículos y también como elemento conductor y orientador a todas las circulaciones peatonales que se conduzcan a la Calle Mayor. Será nuevamente un elemento icónico utilizado por el día a día de todos los Palentinos como un punto clave de referencia”.
En la otra marquesina, la que se ubicará en la propia plaza de León, donde ahora confluyen cuatro de las cinco líneas habituales de autobuses urbanos, se moverá junto a la nueva glorieta. Esta llevará aparejada un reloj como el que ya se colocó junto a la salida de la estación de trenes en la primera fase de la reforma de los Jardinillos.