Tras esta derrota contra el Camargo, el equipo palentino se enfrenta a un difícil camino para recuperar su forma y confianza
El Walamove Balopal está de capa caída. El equipo de balonmano palentino cayó por un abultado 23-32 en casa contra el Club Balonmano Camargo. Ya van 4 derrotas en los últimos 6 partidos. Una situación que van a tener que revertir durante esta semana tanto a nivel anímico como de juego, a pesar de las circunstancias. Y es que el entrenador del conjunto palentino, Fernando Hernández, llegaba con bajas capitales: no contaba con los lesionados Jorge Vega y Mohammed Bousmaha, ni con Daniel Torres, ni tampoco con el lateral derecho, Jorge Cuesta, pilar importante en el equipo. A pesar de ello, el entrenador sacó una plantilla competitiva y llena de caras jóvenes con la que intentar agregar su ritmo de juego.
Si bien es cierto que los diez primeros minutos vislumbraban un halo de victoria holgada para los de Fernando Hernández, tras ponerse hasta 8-3 por encima en el marcador, esto de pronto desapareció. Las buenas sensaciones que acompañaban al equipo en los últimos encuentros se disiparon, y el conjunto palentino no supo dar con la tecla para sobreponerse a la situación. Los cántabros privaron al Walamove Balopal de jugar a su ritmo llevándoselo completamente a su terreno. De igual manera, el gran fallo ante la portería contraria por parte de los locales, y la ineficacia a la hora de generar ocasiones, topándose con la buena defensa del Camargo, terminaron por decantar el partido.
En cuanto a actuaciones individuales, sobre todo destacar al visitante Nikolai Herrero, quien llegó a marcar hasta 11 tantos en el encuentro. El jugador del CB Camargo es el máximo goleador del grupo con la apabullante cifra de 213 goles (casi una media de 10 por partido), lejos del segundo, Sergio Rubio, con 146 aciertos. Por parte del Walamove Balopal, destacar las buenas intervenciones de ambos porteros, sobre todo del vallisoletano Juan Carlos Cabada, quien llegó a frenar hasta en diez ocasiones a los cántabros parando la sangría del equipo.
Una nota positiva del encuentro fue el debut oficial de otro canterano más con el Walamove Balopal. Esta semana disputaba sus primeros minutos con el equipo, Julio Maté, el portero juvenil palentino. Lo hace tras el debut hace dos semanas del central canterano, Samuel Muñíz, quien también jugó contra el CB Camargo anotándoles un tanto por toda la escuadra. Destacar que el equipo terminó jugando con pleno de jugadores de la casa, incluyendo los tres jugadores juveniles (Julio Maté, Samuel Muñíz y Samuel Lora).
De igual manera, la afición, siempre comprometida con su equipo, cumplió con creces en su papel, llenando el pabellón y apoyando en todo momento a sus chicos a pesar de las circunstancias. Ahora es momento de reflexionar, renovar energías y volver a conseguir las buenas sensaciones que tuvo el grupo a principios de temporada.