Además agentes de la Policía Local han sancionado a dos menores de edad por lanzar esputos a los clientes de un establecimiento de la avenida Derechos Humanos
El pasado viernes, a las 16:00 horas, agentes de la Policía Local acudieron a realizar una medición de ruidos en un domicilio ubicado en la Calle Gaspar Arroyo de la capital debido a la celebración de una fiesta. Los resultados de esta medición arrojaron un nivel de ruido excesivo, incumpliendo con las normas de convivencia del vecindario.
Minutos después de recibir una segunda llamada por el mismo motivo, las autoridades acudieron al lugar de los hechos. A su llegada, procedieron a identificar a uno de los jóvenes que se encontraba en la fiesta. Sin embargo, contrario a lo esperado, este individuo, de 23 años, se negó rotundamente a colaborar con los agentes.
La situación empeoró cuando el joven agredió a uno de los agentes presentes por lo que éste resultó lesionado.
Las patrullas presentes lograron controlar la situación y detuvieron al agresor por atentado contra un agente de la autoridad.
En otro orden de cosas a las 20:25 horas del pasado viernes se procedió a sancionar a dos jóvenes menores de edad que se encontraban lanzando esputos a los clientes de un establecimiento de la avenida Derechos Humanos. Los agentes de la Policía Local informaron a sus padres de los hechos y se les propuso para sanción.