La Guardia Civil arresta a una persona por tráfico de drogas tras sospechar por el ‘aroma’ que desprendía su vehículo y hallar 60 kilos de hachís
Seguro que alguna vez, cuando se ha cruzado con alguna persona en la calle que lleva en sus dedos un cilindro humeante, ha percibido cierto olor a naturaleza. A campo. Como si estuviera en el monte, pero en medio de la ciudad. O al pasar por alguna ventana o tapia medio caída en un pueblo han experimentado cómo cierto perfume embriagador le ha invadido. Con esa sensación podrán hacerse a la idea del golpe en las pituitarias que se llevaron ayer los agentes de la Guardia Civil que, dentro de un operativo, pararon a un vehículo en la A-62 (Burgos-Portugal) en la provincia de Palencia.
Sin especificar el punto en el que la patrulla dio el alto al vehículo en cuestión, desde la Guardia Civil de Palencia indican que ayer lunes 3 de marzo, mientras se realizaban las gestiones habituales para comprobar el estado del vehículo, a los agentes les llegó el tufo. “Un fuerte olor proveniente del interior del maletero”, explica la nota remitida a los medios.
Con la sensación de que algo olía como no debía, solicitaron al conductor, español y de 24 años, que abriera la parte de atrás del vehículo, “aumentando la intensidad del olor”. Los agentes se dejaron llevar por su sentido del olfato, discriminando lo que les decían los ojos, dado que no había nada en el maletero, y buscaron un doble fondo.
Su olfato policial les llevó a dar con él y con el origen del ‘ambientador’ del vehículo: 60 kilos de hachís. En concreto, se aprehendieron un total “de 603 tabletas de supuesto hachís, que dieron un peso estimado de 60,300 kilogramos, procediendo seguidamente a la detención del joven”, al que también se le intervino una navaja automática.
Las diligencias instruidas, junto al detenido y la sustancia estupefaciente aprehendida, han quedado a disposición del Juzgado de Instrucción Nº6 de Palencia, señalan desde la Subdelegación del Gobierno.
