Dos jóvenes lanzan una marca de ropa desde la localidad palentina, donde tienen una tienda y manejan el centro logístico, tras dar el salto a los pedidos online
David Herrero / ICAL
Ropa femenina, actual, de calidad y urbanita. Todo ello gracias al emprendimiento de dos jóvenes en el medio rural palentino, de la mano del ímpetu y la profesionalidad de Leticia Martínez y Aitor Colmenero que han lanzado al mercado la marca Milé Design, con tienda física en Paredes de Nava y con la expansión online a través de su página web.
Explican en declaraciones a la Agencia Ical que su mercado se centra en una mujer entre los 25 y los 40 años, donde prima un estilo diferente al resto, pero adecuado a los gustos de la gente, y trabajan con fabricantes europeos procedentes del mercado francés, italiano, español y portugués. Aunque alguna prenda puede tener origen asiático, señalan que la materia prima es de países europeos.
A mayores, presentarán pequeñas colecciones algo más especiales que llevarán su propio sello y diseño, las cuales se enmarcan en una edición limitada. Unas prendas que, actualmente, son fabricadas fuera, pero anuncian que la intención es ir progresivamente fabricando esa ropa más especial y de gama ‘premium’ en Paredes de Nava, con el patronaje de Leticia Martínez, tras adquirir un nuevo local que ejercerá como taller y centro logístico.
Ese es otro punto clave de la marca, dado que toda la ropa y las ventas por la página web y a través de la red social Instagram (@Miledesignn) saldrán desde el municipio palentino, al gestionarse los pedidos y la logística desde el almacén que poseen en el medio rural, aspecto que dejan claro que nunca cambiará en sus planes de expansión.
“Nos gustaría mantener la tienda física en Paredes de Nava, crecer con la nueva tienda online y expandirse de una manera controlada y lenta, con el objeto de intentar abrir más tiendas físicas en otros puntos. Se ha creado una marca y la idea es que crezca”, aseguran.
Los inicios
Martínez traslada que abrieron el pasado mes de abril la tienda Costurissima en la localidad paredeña, con el objetivo de dar el servicio de mercería, ropa interior, costura y arreglos, porque ya no había esa posibilidad y los vecinos tenían que desplazarse hasta la capital.
La idea perseguía llenar un nicho de mercado presente, que se completó a partir de verano con la inclusión de alguna prenda a modo de proyecto piloto sobre la marca actual, algo que tuvo muy buena acogida y funcionó, comenta. Acto seguido, se tomó la decisión de poner en marcha la marca presencial de manera completa.
Por ello, se está a la espera para que, en el mes de noviembre, se pueda poner a la venta en la página web todos los artículos y la ropa con la que se cuenta en la tienda física, la cual siempre se enfocará en ropa femenina y en ciertos accesorios, como calzado y bolsos, pero sin bisutería.
“No es fácil emprender en el medio rural, ya que iniciar todo desde cero es bastante arriesgado. Hacerlo en un pueblo es un hándicap, porque te encuentras bastante limitado”, subraya Leticia Martínez, quien estudió Corte y Confección en la Escuela de Burgos.
