La provincia de Palencia no se enfrentaba a un caso como el de hoy desde octubre de 2015, cuando un varón acuchilló a su pareja en Guardo
O. H.
De Carmen María a Raquel. Pocas cosas unían a estas dos mujeres hasta hoy, cuando la última, de 32 años y empleada en un Lupa de la ciudad, ha tenido el mismo fin que la primera. Muerta a manos, presuntamente, de su pareja. Como en el caso de Carmen María, él posteriormente se habría quitado la vida.
Carmen María y Raquel son las dos últimas víctimas mortales de la violencia machista en la provincia de Palencia, como han ratificado fuentes de la Subdelegación del Gobierno Palencia en la Red, y con una diferencia de casi siete años entre cada uno de los hechos luctuosos.
Porque a Carmen María le quitó la vida un hombre en 2015, en la localidad de Guardo. Tenía 33 años, uno más que Raquel, y llevaba apenas un año con el hombre que la apuñaló. Ambos regentaban desde hacía unos meses un conocido bar de la localidad guárdense.
En Guardo.
Bar en el que se encontraron los cadáveres de ambos en una mañana de principios de octubre de 2015. El de la mujer, de nacionalidad nicaragüense, en un charco de sangre. El del hombre, apodado Tato, de 46, ahorcado. La voz de alerta la dieron los vecinos que avisaron a los bomberos de un intenso olor a gas. Al entrar, los efectivos se encontraron con la macabra imagen.
Casi siete años después Palencia, en este caso la capital, se enfrenta a un caso similar, en el que un hombre acaba, presuntamente, con la vida de su pareja, con la que tenía un hijo en común de dos años (ella tenía otra de siete), y luego se quita la vida.
En este caso fue el presunto asesino, carretillero temporal en SMP, quien puso en marcha el proceso para que las fuerzas de seguridad tuvieran conocimiento de lo que había hecho, al arrojarse, al parecer, a las vías y ser arrollado por un tren. Cuando los agentes fueron a comunicar a su domicilio lo que había ocurrido, la muerte del hombre, fue la hija de 7 años de la mujer la que abrió la puerta. En la habitación de al lado, su madre yacía muerta desde hacía unas horas. Según la información facilitada por la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, con signos de estrangulamiento.
La abuela materna se habría hecho cargo de los dos huérfanos.
Concentraciones y día de luto
En el caso de Guardo, no mediaban denuncias de malos tratos o violencia de género. En el de hoy en Palencia, tampoco, pero como ha destacado la Policía Nacional, el presunto asesino de la avenida de Reyes Católicos de la capital, sí se le habría investigado en 2019 relacionado con violencia de género, pero la investigación habría decaído al no presentar su pareja denuncia.
El Ayuntamiento de Palencia, como varias asociaciones y colectivos ha manifestado ya su dolor por este trágico suceso, y ha decretado un día de luto oficial en la ciudad.
Del mismo modo se ha convocado para mañana desde las instituciones una concentración silenciosa a las 12 horas en la Plaza Mayor, donde se guardarán cinco minutos de silencio. A esa misma hora, los compañeros de Raquel en su puesto de trabajo en el Lupa de Cardenal Cisneros, también se concentrarán en su recuerdo y en repulsa por el crimen, junto a los vecinos que quieran acompañarles.
En 2019 en Madrid.
Pero además de los casos que han ocurrido en territorio palentino, no han sido solo Carmen María o Raquel, las únicas palentinas que han muerto a manos, presuntamente, de sus parejas. También otras palentinas, aunque en otras partes del país han sufrido la lacra de la violencia machista hasta sus últimas consecuencias.
Fue el caso, por ejemplo, de María del Pilar, una cirujana de 48 años, natural de Paredes de Nava, que fue asesinada en 2019 en su casa en el distrito de Tetuan en Madrid.
En aquel caso, María del Pilar ya estaba registrada como víctima de violencia de género, ya que una patrulla fue testigo de una agresión por parte de su pareja en plena calle. Sin embargo, ella no quiso presentar denuncia.
016, la línea de atención a todas las formas de violencia contra la mujer
Es por ello que como aconsejan desde la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, lo principal es saber detectar los primeros síntomas de violencia de Género basados en ciertos comportamientos, “actitudes, comentarios u omisiones que son manifestaciones de la violencia de género”, como “si ignora o desprecia tus sentimientos con frecuencia; ridiculiza, insulta o desprecia a las mujeres en general; Te humilla, grita o insulta en privado o en público; amenaza con hacerte daño a ti o a tu familia; te ha agredido alguna vez físicamente; re aísla de familiares y/o amistades; te ha forzado a mantener relaciones sexuales en contra de tu voluntad; re controla el dinero y toma las decisiones por ti; no te permite trabajar o amenaza con quitarte a tus hijas e hijos en caso de dejarlo”.
En ese caso recomiendan buscar asesoramiento y ponerlo en conocimiento de las fuerzas de Seguridad. Además destacan la Línea 016 que es el servicio de atención a todas las formas de violencia contra las mujeres, al que se puede acceder a través del teléfono, (llamada al 016), a través de correo electrónico (016-online@igualdad.gob.es) o por WhatsApp (600 000 016).
Se trata de un servicio gratuito, confidencial, accesible para personas con discapacidad auditiva y/o del habla y baja visión y en hasta 50 idiomas.