Fue operado en el hospital de campaña y su vida no reviste peligro
Juanma de Saá / ICAL
El Toro Enmaromado de 2022, Siguiñuelo, completó en 71 minutos su recorrido por las calles de Benavente (Zamora), en una carrera desigual pero que convenció a los benaventanos y que se saldó con una cornada, una fractura de muñeca y varias contusiones.
Un joven de unos 30 años, natural de la comarca de Benavente, recibió una cornada en el cuello y fue operado de urgencia en el quirófano portátil del hospital de campaña. El herido fue trasladado en UVI móvil al Hospital Virgen de la Concha, en la capital zamorana y su vida no corre peligro, según informaron a Ical fuentes municipales.
A las 19.30 horas, con casi 36 grados, sonó la tercera bomba, que marcaba la salida del toro, un cinqueño de 580 kilos, de la ganadería Peñajara de Casta Jijona, de Peraleda de la Mata (Cáceres).
Con brío toril
Siguiñuelo salió con brío del toril y corrió con soltura hasta la argolla de la plaza de la Madera, en solo cuatro minutos de carrera y donde está tradicionalmente programado el primer descanso.
Tras reanudar la carrera, tardó más de lo esperado en llegar a la plaza de Juan Carlos I y, en la célebre calle de los Carros, donde se esperaba que acelerase el paso al ser cuesta abajo, se detuvo varias veces.
En ese punto, a las 20.10 horas, la organización decidió acortar el recorrido hacia la plazuela de los Leones y, desde ese punto, hasta el Matadero. De esta forma, el toro cubrió unas tres quintas partes del recorrido previsto. La bomba que anunciaba la muerte de Siguiñuelo sonó a las 20.41 horas.
Recorrido acortado
“Estamos muy contentos con la carrera de Siguiñuelo. Ha sido un gran toro, con un comportamiento espectacular en la primera parte. La gente ha terminado contenta. Al final, bajo las premisas de la protección de los corredores y de la imagen de nuestro festejo, se acortó el recorrido”, destacó el alcalde de Benavente, Luciano Huerga, además de agradecer el despliegue de la Policía Municipal, la Guardia Civil, Protección Civil y el SACyL.
“Tenemos que hacer mucha pedagogía. Hay que intentar que los corredores dejen espacio al animal, especialmente, cuando son toros de tal bravura y casta. Si les quitamos los espacios y la gente está a un metro del animal, se desgasta el toro y va en detrimento de la fiesta”, advirtió.
Por su parte, la concejala de Fiestas, Patricia Martín, valoró el “buen recorrido, a pesar del calor” reinante. “Tomamos la decisión de acortar el recorrido por la protección de los participantes y por la protección de la fiesta porque no nos gusta sacar el cajón. Estoy muy contenta. Ha sido una apuesta diferente y estoy satisfecha del cambio de encaste”, subrayó.