Otro conductor fue llevado también ante el juez por conducir teniendo el permiso retirado
De buena mañana, quizá la noche había sido larga, un conductor colisionó con su vehículo este pasado fin de semana en la capital palentina contra un autobús urbano. Y a consecuencia de ello, acabó teniendo una citación con el juez como presunto autor de un delito contra la seguridad vial.
Porque, según obra en el parte de la Policía Local, a las 8,30 horas del pasado sábados tuvieron que acudir los agentes del Cuerpo de Seguridad municipal al cruce entre la calle Tarifa y el Paseo del Otero. Allí, un autobús urbano y un turismo habían sufrido un accidente, sin daños personales.
Pero como parte del protocolo, los policías locales sometieron a los conductores a un control e alcoholemia. Y este determinó que el conductor del turismo, un varón de 36 años, conducía bajo los efectos del alcohol. Con tanto nivel, que los agentes iniciaron el procedimiento para que investigarlo como presunto autor de un delito contra la seguridad del tráfico.
En un control
No fue el único conductor que el pasado fin de semana recogió una citación para ir ante el juez. También fue propuesto como investigado, y por lo visto no era la primera vez, otro conductor irregular, al que los agentes detectaron en un control estático de circulación en el mismo Paseo del Otero, el sábado, pero ligeramente más tarde. Entre las 13 y las 14 horas se montó el dispositivo, y se localizó a un hombre de 53 años, conduciendo pese a tener decretada la suspensión temporal del Permiso de Conducir por sentencia Judicial.
En el mismo control se denunció a siete personas por no hacer uso del cinturón de seguridad, a 6 conductores por conducir sin la ITV, uno por ir hablando por el móvil y a otro más por positivo en alcoholemia.
Los que no necesitaban carné, pero aún así fueron parados por los agentes de la Policía Local, fueron tres menores a los que los agentes los vieron a los mandos de un vehículo de cuatro ruedas, apto para el transporte de mercancías al por menor. Porque en medio de la calle Mayor Antigua les pillaron montados en un carrito de la compra. Los agentes comprobaron que no habían tenido ningún accidente en su marcha sobre el carrito, y no localizaron daños en ninguno de los automóviles cercanos a dónde habían conducido su vehículo.