En Frómista se encuentra Bar París, un punto de encuentro que atrae tanto a vecinos como a peregrinos en busca de un respiro y un lugar para recargar energías
Desde el pasado mes de octubre, este conocido establecimiento ha sido renovado bajo la dirección de José Alberto, un emprendedor que ya disponía de experiencia previa en el sector y que además mostraba un fuerte apego por esta localidad.
Originario de Villamuera de la Cueza (Villoldo), pero con un cariño especial por Frómista, José Alberto encontró en el traspaso de la gerencia del Bar París la oportunidad perfecta para iniciar un nuevo proyecto profesional en un lugar que siempre le ha encantado.
Fue un día cuando paseando vio que Bar París traspasaba su gerencia. En ese momento, y sin pensarlo mucho, José Alberto decidió llamar, preguntar y finalmente aceptar tomar las riendas del negocio. Uno de sus amigos le dijo antes de comenzar: “Cógelo que te va a ir bien”, y afortunadamente así está siendo en estos primeros meses.
Bar París abre sus puertas a las 7 de la mañana para recibir a sus clientes con el aroma de uno de los mejores cafés de la zona, ofreciendo desayunos para empezar el día con buen pie. A lo largo de la jornada, la carta se amplía con raciones, bocadillos y platos combinados.
TERRAZAS. Además de su acogedor interior, el Bar París cuenta con dos terrazas que se convierten en espacios idílicos para disfrutar del aire libre y del ambiente tranquilo y familiar que caracteriza a esta zona de Frómista.
Y con la llegada de los cálidos meses de verano, José Alberto planea sorprender a sus clientes con actuaciones de flamenco para animar las tardes y crear un ambiente festivo y alegre.
