El acto de inauguración tuvo lugar ayer, y en él estuvieron presentes, entre otros, Mons. Mikel Garciandía Goñi, obispo de Palencia, además de José Luis Calvo Calleja, delegado diocesano de Patrimonio Artístico, y José Enrique Martín Lozano, secretario general de la Fundación Las Edades del Hombre
El Museo de San Pedro de Frómista, ubicado en la iglesia parroquial del mismo nombre, ya muestra un nuevo rediseño expositivo gracias a la colaboración entre la Parroquia de Frómista y la Fundación Las Edades del Hombre que han sido las entidades que lo han hecho posible.
El objetivo de esta actuación ha sido la de ofrecer a los visitantes y peregrinos que llegan a la localidad durante todo el año una nueva forma de apreciar el arte que alberga este emblemático espacio.
Fue en el día de ayer cuando se llevó a cabo la inauguración oficial de la nueva musealización y en el acto estuvieron presentes Mons. Mikel Garciandía Goñi, obispo de Palencia, además de Juan Carlos Martínez Mayordomo, párroco de la Unidad Pastoral de Frómista, José Luis Calvo Calleja, delegado diocesano de Patrimonio Artístico, y José Enrique Martín Lozano, secretario general de la Fundación Las Edades del Hombre.
La ceremonia contó también con la participación de numerosos vecinos de Frómista así como con el alcalde del municipio, diversas autoridades y miembros de la comunidad parroquial.
La iglesia de San Pedro alberga un importante número de obras artísticas de carácter religioso que proceden de diferentes templos tanto de Frómista como de otras poblaciones cercanas. La exposición está organizada en varios bloques temáticos que siguen un relato. Algunos de ellos son la Iglesia, el Camino de Santiago, Historia de la Salvación y el Retablo Mayor de la Iglesia de Santa María del Castillo de Frómista.
El recorrido permite al visitante un acercamiento a la iglesia fromisteña, así como a la figura del Apóstol Santiago. Se hacen referencias al Camino Francés ya que tiene en Frómista uno de sus enclaves más destacados. También se destaca a personajes como San Telmo que nació en esta misma localidad palentina.
Las piezas que se exponen son símbolo de la espiritualidad de un pueblo que tenía en la parroquia un soporte esencial de su vida. Piezas que además permitirán al visitante entender y visualizar la evolución del arte, sobre todo de los periodos gótico, renacentista y barroco.