Bomberos y técnicos de Naturgy determinan que no se debía a ningún escape sino a la deficiente combustión inicial de una caldera
Un vecino del callejón del colegio Jorge Manrique de la capital palentina daba la voz de alarma a las 17 horas de hoy. “Ha comunicado que se estaba sintiendo un fuerte olor a gas”, explican desde Emergencias 112 de Castilla y León. Un colegio con algunas actividades a esas horas, familias que iban a recoger a algunos niños y una plaza de juegos no eran el mejor escenario para que se confirmara el escape.
Por eso, rápidamente se desplazaron hasta el lugar efectivos del Parque de Bomberos de Palencia, Policía Local y personal de emergencias de Naturgy que trataron de dar con la presunta fuga de gas ante el estupor de las numerosas personas que asistían a la escena.
“Finalmente, el técnico no ha logrado dar con la fuga”, confirman desde el 112. No ha dado con ella, porque no existía como tal.
Y es que como indican desde Bomberos Palencia, el origen de lo que se pensaba que era un fuerte olor a gas era “el humo de una caldera que estaba arrancando”. Porque se han dado varias circunstancias: por un lado, que “hay calderas de carbón, de madera o de gasoil, que cuando empiezan a encenderse no tienen una combustión completa, es algo deficiente”. A esto se ha unido “la presión atmosférica” que ha hecho que esos vapores y ese humo que debería haber ascendido se haya quedado a ras de suelo, por lo que se ha hecho más presente”. Y por ello ha llamado más la atención de los vecinos.
Finalmente, la alarma ha quedado en un susto, y en unos momentos de expectación para quienes pasaban por la zona andando, porque en coche era imposible ante el corte de la calle doctrinos, ocupada por las dotaciones de bomberos y de Policía Local.
