El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico publica el informe ambiental de la actuación para “potenciar e incrementar los valores naturales del entorno del Ramal Campos”
Quitar lo que tiene poco valor (cultural y ecológico) pero que se ha ganado a pulso durante años el estar allí aún siendo invasivo, para sustituirlo por nuevos ejemplares que aporten una mejor integración ecológica. Esto es. Apear y talar los árboles en mal estado y de especies que salvo sombra poco aportan y sustituirlas, incluso en un número mayor, por ejemplares de otras más adecuadas y con una mayor influencia en la vida natural. Es lo que se pretende hacer en el Ramal de Campos del Canal de Castilla que surca las provincias de Palencia y Valladolid entre El Serrón (en Grijota) y la dársena del Canal en Medina de Rioseco, si bien el proyecto toca parte del Ramal Norte, desde Calahorra de Ribas a El Serrón.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico acaba de publicar el informe ambiental de la actuación que pretende “potenciar e incrementar los valores naturales del entorno del Ramal Campos del Canal de Castilla”. Un proyecto que no se someterá al procedimiento de evaluación ambiental ordinaria “ya que no se prevén efectos adversos significativos sobre el medio ambiente, siempre que se cumplan las medidas y prescripciones establecidas en el documento ambiental”.
El proyecto consistirá en la “eliminación de arbolado en mal estado y la posterior replantación en módulos de forestación, en su mayoría de especies autóctonas, de modo que se consolide el Canal de Castilla como corredor ecológico. Además, se potenciará el valor ecológico de la zona mediante la adecuación de cinco humedales colindantes con el Canal de Castilla, que están catalogados como Zonas Húmedas Catalogas. Adicionalmente, el proyecto incluye la recuperación y acondicionamiento de los canales de sirga para su uso recreativo por la población”.
En el apartado de eliminación del arbolado y los arbustos no se meterá la traílla sino que primero se llevará a cabo “un listado y señalamiento de ejemplares a eliminar que incluirá las especies en mal estado fitosanitario”. Principalmente se llevará a cabo la eliminación de los ejemplares de olmos y chopos, “que muestren mal estado fitosanitario (signos de cualquier enfermedad forestal, partes secas del árbol, etc.), malformaciones, decaimiento en el vigor, o que puedan representar cualquier otro peligro en la transitabilidad de los caminos de sirga o en el libre discurrir de las aguas del Canal de Castilla”.
En principio, se ha calculado que a lo largo de los cerca de 80 kilómetros hará falta apear “24.794 ejemplares, debido a su mal estado, pertenecientes en su mayoría a clases diamétricas pequeñas”.
Sustitución
Su sustitución se llevará a cabo con “23 especies arbóreas y 11 arbustivas entre las que se incluyen algunas generadoras de frutos altamente apreciados por las aves. Los ejemplares de Ulmus minor a emplear serán variedades resistentes a la grafiosis y contar con sus correspondientes certificados”. En total, el promotor estima un total de 29.780 ejemplares objeto de repoblación para dar cobertura a 202 hectáreas repartidas en 145 tramos de actuación. Tramos que no serán homogéneos, sino que se establecerán 9 módulos de actuaciones.
Estas plantaciones deberán llevarse a cabo en jornadas en las que no se ponga en riesgo la viabilidad de los ejemplares y se llevarán a cabo riegos de implantación separados cada uno de entre uno o dos meses para que no les ocurra como a ejemplares plantados en otras reforestaciones.
Areas de esparcimiento y humedales
Se crearán un total de 5 Zonas de Esparcimiento (ZE), “en puntos considerados valiosos del Ramal Campos, desde un punto de vista tanto ambiental como cultural. Estarán dotadas de los equipamientos de uso público y educativo que requerirá un acondicionamiento previo del terreno” señala el documento.
Estas zonas estarán ubicadas en Calahorra de Ribas, los entornos de La Venta de Valdemudo, la Casa del Rey en Paredes de Nava, en Fuentes de Nava y en Capillas
Por otro lado, se actuará en cuatro lagunas declaradas como Zonas Húmedas Catalogadas (ZHC) en Castilla y León, para llevar a cabo actuaciones de refuerzo adicionales a las ya ejecutadas en el Proyecto LIFE.
Para ello se crearán “pequeños bosquetes de vegetación aledaña a dichas zonas húmedas, con el objetivo de potenciar la biodiversidad y mejorar los hábitats de las especies a conservar. También, se llevará a cabo la plantación de 158 ejemplares de vegetación autóctona, de diferentes especies, que crearán una barrera natural para las labores agrícolas y para los usuarios de los caminos de sirga del canal”.
Las cuatro Zonas Húmedas Catalogadas elegidas para efectuar estas actuaciones son las siguientes: La Charca de Las Casas del Rey en Paredes de Nava, las Charcas del Arroyal y de Rosalejo en Capillas y la de la Esclusa 4 en Castil de Vela.