*Por Pardo
De puente a puente y tiro porque me lleva la corriente. Y así fue, entre el Darro y el Genil caminábamos pasada la centena de palentinos. Algunos, los más osados partieron a principio de semana por aquello de no encontrar mucho tráfico como excusa perfecta para disfrutar de la nieve de Sierra Nevada aunque pronto la idea hizo aguas por todas partes al descubrir que la cantidad de nieve acumulada era escasa (por estas cosas los osos hibernamos).
Haciendo acopio del temple que nos caracteriza pronto descubrieron que en Graná hay mucho grano y poca paja. ¡No ni ná! Y encontraron entre sus calles el refugio perfecto para matar el tiempo de más, entre caña y tapa (éstas últimas bien merecen el sobrenombre de primer plato).
Yo salí de la osera más pronto que tarde, peinado y acicalado para tan digna ocasión, bien acompañado como siempre y con el corazón encogido, más que nada por aquello de jugarnos las habichuelas contra unos amigos ¡Qué pena más grande ainss!
Reconozco que poco nos cuesta movernos, poco o nada, y es que el baloncesto siempre es motivo perfecto y más si lo hacemos en grata compañía. Sabéis que de básquet hablo más bien poco y nada sé, pero lo de animar lo llevo en la sangre ¡por mucho que Pulevín quisiera ganarse a los míos!!!
Caminar por el Paseo de los Tristes quizá fue el presagio de lo que un día más tarde tendríamos que aguantar en la cancha.
Nos Alhambró tan bella estampa desde el mirador de San Nicolás o perdidos por las calles de Albaicín. ¡Si los Reyes Católicos supieran la cantidad de castellanos que los visitaron en estos días!
¡Cuidado que es grande Graná y sus gentes! pues en cada calle, en cada rinconcito, encontrábamos estoica resistencia palentina.
Cañatapeando llegamos al pabellón, y de lo que allí sucedió poco hablo y ya nada importa porque siempre seguiremos animando a los nuestros. Gracias a la afición granadina que intentó poner tirita en nuestra brecha, no fue ni mucho menos remedio pero sí alivio. Que de vez en cuando te muestren cariño es de vital importancia. ¡Prometemos volver! ¡Que aún nos queda Sacromonte y un sinfín de calles por descubrir!
Nosotros seguiremos siendo aliento de los nuestros y grito en la grada sea en Madrid, Santiago o Granada porque somos y seremos el único e indestructible #SentimientoPalentino
¿Sí o qué?
*Pardo es la cuenta en redes sociales de la mascota no oficial del Zunder Palencia.
