Igualmente, fue auxiliada una mujer con lesiones en una pierna al tropezar con unos tablones que tapaban una arqueta sin tapa en la Huerta de Guadián
Por su parte, los servicios de extinción sofocaron los incendios sin mayores consecuencias
Parece que el tiempo sigue inclemente en sus altas temperaturas y sus efectos los estamos comprobando en los sucesos del Parte de la Policía Local de Palencia. En la mañana de ayer, los agentes tuvieron que auxiliar a un varón de 40 años en la calle Empedrada que se había desplomado por un mareo y se hizo una brecha en la cabeza.
Igualmente, otro varón de 71 años sufrió un desmayo en la calle Mancornador por causas desconocidas, fue trasladado en ambulancia al Hospital Rio Carrión. Además, a las 20:35 horas, en la Avenida Simón Nieto, se auxilió a un tercer varón de 79 años que se encontraba en ropa interior y desorientado en el rellano de un portal. Los agentes pudieron localizar a un familiar para darle conocimiento de los hechos y también se le trasladó al CAUPA en ambulancia.
Finalmente, a las 22:48 horas, en el parque de la Huerta Guadián, se atedió a una mujer de 45 años que sufrió lesiones en una pierna al tropezar con unos tablones que tapaban una arqueta sin tapa. Ella misma se trasladó por su propios medios a un Centro de Salud para ser atendida.
OTROS SUCESOS
Al margen de estos asuntos, los Bomberos de Palencia acudieron a la zona del Barredo Viejo para sofocar un incendio de maleza. Otro incendio similar se produjo en la Avenida de Madrid en las proximidades de la depuradora. Debido a la magnitud del fuego, fue necesaria la presencia de dos equipos de extinción de la Diputación. El fuego quedó extinguido a las 19:30 horas.
Del mismo modo, la Unidad de Medio Ambiente de la Policía Local acudió a la Avenida Vacceos porque un ciudadano había localizado un perro perdido. Tras lectura del microchip, los agentes localizaron al propietario, que se hizo cargo del animal. Otro can atrajo la atención de los vecinos de la Avenida Modesto Lafuente por sus ladridos. Se verificó que los hechos son ciertos y el dueño fue denunciado.
Como punto final, la jornada dejaba al filo de la media noche una llamada desde el portal de la calle María de Molina de unas personas encerradas en un ascensor. La Policía solicitó la presencia del servicio de bomberos, que procedió al rescate de seis adultos y un menor de edad.
