El día en que el Zunder Palencia ascendió a ACB, Torquemada estallaba en júbilo por su propio éxito deportivo: el recuperado club deportivo se alzaba vencedor del Torneo Provincial 2023
Alba Calle Pérez
A veces, el auténtico espíritu del deporte no está en el Bernabéu, ni en la liga Endesa. Está en las gradas y en los equipos pequeños formados por voluntarios y movidos por la ilusión. Es el caso del Club Deportivo Torquemada, que había estado a punto de desaparecer en los últimos años. Un grupo de jóvenes no solo ha conseguido recuperar el proyecto, sino que incluso ha logrado su victoria en el Torneo Provincial que organiza el servicio de Deportes de la Diputación.
¿Cómo surgió la iniciativa de refundar el equipo de fútbol de Torquemada?
El equipo de fútbol de Torquemada lleva muchos años sin estar federado, pero en este torneo de la Diputación sí que lleva bastantes años. Lo que pasa es que después del covid no se jugó el torneo, no había quien llevase el equipo. Lo cogimos entre cinco personas, este año soy yo la cara visible pero lo llevamos entre todos. Le dimos una vuelta al quipo, un cambio generacional, y aquí estamos.
Fue un equipo que, en su momento, tuvo victorias importantes
Hace varias décadas sí, pero en los últimos años no era frecuente ganar los partidos. Después de la pandemia hacia aquí sí que ha habido un cambio importante en el equipo, quizá un cambio generacional, sobre todo jugadores nuevos, gente joven del pueblo que ha empezado a funcionar y que hay bastante seriedad y ha hecho un equipo bastante competitivo.
« Fue el apoyo del público y de todo el pueblo lo que nos hizo ganar»
¿Sobre qué rango de edad estáis?
El rango de edad es muy amplio, desde los 18 o 19 años hasta los 46, que es el mayor, pero la mayoría entre los 20 y 30 años.
Vuestra victoria se ha vivido en el pueblo con una enorme ilusión. ¿Qué dijeron vuestras familias y vecinos?
Fue todo increíble, todo el mundo ha estado volcado con el equipo desde el minuto uno, tanto nuestras familias como el pueblo en general, sobre todo los últimos partidos y en la semifinal, jugamos la vuelta aquí en Torquemada… Y bueno, yo he hablado con muchísima gente del pueblo esta semana y todo el mundo estaba encantado. Había vuelto un poco la ilusión del fútbol al pueblo, una cosa de la que nos sentimos muy orgullosos de haberla traído.
¿Qué opinó la gente de traer de vuelta este equipo que parecía muerto?
Como te he dicho la gente se ha volcado más de lo que esperábamos. Hace muchos años el fútbol era importante aquí, pero últimamente casi nadie iba a los partidos. Y a medida que iban llegando los resultados la gente se fue animando. Cuando jugamos la final en Baltanás, aquí al lado, el público se contó por centenas. Me atrevería a decir que ganamos la final gracias al público.
Los jugadores del equipo antiguo también se han volcado con nosotros, todo el mundo remamos en la misma dirección. El propio Ayuntamiento y los concejales de ambos partidos están apoyando con el equipo.
Y además del apoyo de la gente, el Ayuntamiento ha contribuido en todo lo que se ha pedido, nos han dado balones y para el futuro nos han propuesto qué otras cosas que podemos implementar y en la final nos pusieron un autobús…
¿Cómo fuisteis capaces de planear los entrenamientos para estar preparados antes de que empezase la fase del torneo?
Es un torneo en el que muchos equipos no entrenan y nosotros sí que hemos entrenado, sobre todo cuando hemos pasado la fase de grupos, pero lo que más hemos hecho ha sido jugar juntos. La mayoría del equipo llevamos jugando juntos muchos años y al final te acostumbras y durante la fase de grupos hemos rodado el equipo sobre todo con la gente nueva, que se ha amoldado perfectamente al esquema, y entre entrenamientos y partidos, hemos hecho un equipo muy competente.
¿Esperabais ganar?
Cuando empezó el campeonato, perdimos dos de los tres primeros partidos. Veníamos de hacer una buena campaña anterior, pero habíamos perdido tres de nuestras principales bazas por lo cual estábamos menos ilusionados que otras veces. Pero conforme íbamos jugando no mirábamos al futuro, sino que íbamos partido a partido. Fuimos pasando rondas y, cuando nos plantamos en la final, casi no nos lo creíamos.
Así que vimos que había que darlo todo y jugábamos contra una Pedraza que nos había ganado en la fase de grupos y que son un digno rival y un merecido finalista. Y, aunque el partido estuvo igualado en el campo, en las gradas les ganamos por goleada y ahí te puedes imaginar la alegría y la ilusión. Nadie daba un duro por ganar, ¡pero aquí estamos!
¿Qué objetivos tenéis a partir de ahora?
No lo tenemos aún claro porque podríamos dar un paso más y quizá buscar una liga federada o algo así, pero hay que pensarlo muy detenidamente. De momento queremos seguir por esta línea, trabajar mucho con el equipo que tenemos, hemos formado una piña de amigos e iremos a lo que vaya saliendo en la misma dirección, pero todavía estamos con la resaca emocional de la final.
Con el dinero del premio, 300 euros, haremos una merienda con el equipo y si sobra invitar a toda la ficción. Si no hubiésemos ganado ningún premio lo hubiésemos hecho igual. Eso es lo más importante del torneo.
