Un acto en el Consultorio ha servido como cierre a la larga trayectoria de esta sanitaria que se jubila esta semana
De hacer llorar con pinchazos y jeringuillas hace años a que esos mismos niños sean los que ahora te hacen llorar, pero de emoción.
Es lo que ha experimentado al final de una larga trayectoria sanitaria Inés Otero Boto, la enfermera más veterana del Consultorio de Barruelo de Santullán, que se jubila esta semana y a quien buena parte de sus vecinos han querido rendir un homenaje en su despedida.
Un momento emotivo el que se ha vivido esta mañana frente al Consultorio de Barruelo de Santullán donde decenas de vecinos y miembros de la corporación municipal, encabezados por el alcalde, Cristian Delgado, se han despedido a Inés Otero, agradeciéndole, como no podía ser de otra forma, “los años de trabajo al servicio de todo el pueblo”, explicó el regidor.
Durante el acto, Delgado aseguró que la de Otero “ha sido toda una vida de cuidados a los demás”, especialmente a los vecinos de Barruelo y de la zona norte de Palencia y “ahora le toca descansar a ella”, dado que tiene en ciernes su jubilación.
En este acto, la concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Barruelo de Santullán, María Ángeles Polanco del Barrio, le ha hecho entrega a la veterana enfermera de un detalle “en nombre de todo su pueblo”.
Inés Otero, visiblemente emocionada, ha agradecido el reconocimiento de quienes han sido sus pacientes y se ha acordado de sus inicios en Barruelo de Santullán. “Pese a todo lo que me dijeron, jamás me he arrepentido de venir aquí”, sentenció en su intervención.
Pero dejando atrás los momentos emotivos, el alcalde de la localidad enarboló la bandera de lo práctico y ante la baja de la enfermera jubilada, Delgado anunció que el Ayuntamiento de Barruelo se mantendrá “vigilante para que la plaza de Inés se cubra lo antes posible, por parte de la Junta de Castilla y León”.