Marcilla de Campos te invita a conocer su Centro de Interpretación de la Vida Rural
Marcilla de Campos es tradición, historia, naturaleza. Marcilla de Campos quiere mostrar a todos aquellos que no lo conozcan, cómo era la forma de vida y de trabajo del siglo pasado. Para ello este municipio cuenta con un Centro de Interpretación de la Vida Rural que aúna diversos objetos en distintos lugares que constituyen documentos fehacientes de nuestra historia más próxima.
Se trata de un museo al aire libre, parte del cual se halla ubicado en el barrio de Las Bodegas, que contiene herramientas y máquinas que manejaron nuestros antepasados y que se encuentran ilustrados con sus nombres. Entre ellas se puede contemplar un Reloj Ecuatorial, Caseta Guardaviñas, Olmo de Machado, El Girasol, Mirador de San Marcelo, Los Olmos, La Fábula, El Trigo, La Vid, Máquina del tiempo o un Arado de viento.
Todo ello se completa con un itinerario en el que se puede ver La Laguna y el Reloj Orbital, el Palomar de las Mercedes o El Herradero.
“La visita se complementa con una exposición de esculturas fabricadas con hierro procedente de antiguos aperos de labranza. Algunas son animadas, tienen piezas móviles o sonidos, y todas ellas tienen un fin didáctico”, explica Fernando Estébanez Gil, promotor de este Centro de Interpretación de la Vida Rural.
Otra de las particularidades de esta exposición es el componente literario del que goza ya que se muestran poemas y leyendas propias de Marcilla. “Mi agradecimiento a amigos y familiares que mediante la cesión desinteresada de construcciones, máquinas o aperos de labranza contribuyen a que se conserve nuestro acervo cultural”, añade Estébanez Gil.
Esta iniciativa tiene un trasfondo solidario. Y es que los promotores cooperan con la ONG palentina “Amidecon” que trabaja en el desarrollo de uno de los países más empobrecidos: la República Democrática del Congo. Por ello a cambio de las visitas guiadas se solicita un donativo. Para grupos se hacen reservas en el correo visitamarcilla@gmail.com.
También es posible hacer visitas individualizadas con el móvil a partir de 30 códigos QR que se encuentran en los lugares de interés, partiendo de la plaza o las bodegas. Aparte de lo existente hay proyectos nuevos que sorprenderán a los visitantes.